La mayor parte de países tiene ajustes automáticos para su sostenibilidad
La Comisión señala que sin estos mecanismos, el gasto en pensiones subiría en 3,3 puntos hasta el año 2050 frente a los solo 0,1 puntos que implica tener en marcha los correctores
Recién aprobada la reforma de pensiones el pasado jueves en Consejo de Ministros, es hora de hacer balance y conocer las medidas que, para hacer frente al envejecimiento y a la mayor esperanza de vida, se está llevando en otros países de la Unión Europea (UE) a la hora de fijar la edad de jubilación.
Los países de la UE, en su mayor parte, cuentan con un mecanismo de ajustes automáticos donde las variaciones de la esperanza de vida se vinculan a la edad legal de jubilación. En este grupo de países, se lleva a cabo una vinculación 1 a 1, es decir, que todos a los años de vida adicionales esperados se traducirán en un mismo aumento del número de años que deben seguir trabajando, mientras que la duración media del periodo de jubilación se mantendrá constante. Todo ello conduce, según se desarrolla en el estudio ¿Reglas fiscales en la Seguridad Social?, elaborado por Enrique Devesa de la Universidad de Valencia, IVIE y Rafael Doménech de BBVA Research recogido por Funcas, a una disminución de la relación entre el número de años de percepción de la pensión y el número de años cotizados. Otros aplican que la edad de jubilación se ajuste en dos tercios del aumento de la esperanza de vida.
Las proyecciones de la Comisión Europeas resultan en este sentido lapidarias. Contempla que en los países con algún mecanismo de ajuste, el aumento del gasto en pensiones entre 2019 y 2050 es de 0,1 puntos porcentuales del PIB. Sin estos mecanismos, este incremento sería de 3,3 puntos. A continuación que están haciendo algunos países para adecuar la edad de jubilación a la esperanza de vida.
Dinamarca. En 2022 la edad legal de jubilación es de 67 años, como en España, con la diferencia de que aumentará gradualmente hasta los 69 años en 2035. A partir de este año, los incrementos estarán vinculados a la variación de la esperanza de vida a los 60 años, tomando como base la del año 2020. Los ajustes son quinquenales y deben ser aprobados por el parlamento. En este caso, la vinculación es completa, ya que cada año que se incremente la esperanza de vida conduce a un aumento de un año en la edad legal de jubilación.
Estonia. En este país báltico se jubilan legalmente a los 64 años y tres meses, con la particularidad de que se está incrementando en tres meses por año hasta llegar al tope de los 65 años en 2026. A partir de ese año, esta edad se revisará en función de la esperanza de vida a los 65 años, realizándose ajustes cada año con la relación 1 a 1 entre los aumentos de esperanza de vida y edad legal de jubilación.
Grecia. En el país heleno la edad para el cese de la actividad laboral es de 67 años, si bien desde 2021, esta edad está vinculada en una relación 1 a 1 entre los cambios en la esperanza de vida a los 65 años, procediéndose a un ajuste cada tres años.
Italia. El ajuste se realiza cada dos años de acuerdo con los cambios en la esperanza de vida a los 65 años. El cálculo se obtiene como la diferencia entre la esperanza de vida promedio de los dos últimos ejercicios y la de los dos años anteriores. El límite máximo de incremento de la edad de jubilación es de tres meses. Si el aumento de esta esperanza de vida supera los tres meses, el diferencial respecto al mencionado límite superior, se ajustaría en los periodos siguientes, con lo que existe una vinculación completa.
Chipre. Actualmente, la edad de jubilación son los 65 años, sin embargo, a raíz de la reforma de 2012, se fijó un mecanismo de ajuste automático por el cual a partir de 2024, se revisará cada cinco años en línea con los cambios que se produzcan en la esperanza de vida a los 65 años, también con una vinculación completa.
Finlandia. Este país nórdico es de los pocos en Europa que cuenta con un doble mecanismo de ajuste automático, como consecuencia de que los cambios en la esperanza de vida no solo producen cambios en las cuantías de la pensión, sino también la edad legal de jubilación. En 2022 la edad de retiro fue de 64 años, aumentando gradualmente en tres meses por año hasta los 65 años en 2027. Será a partir de 2030, cuando esta edad se revisará con carácter anual con la esperanza de vida a los 65 años. La diferencias con los sistemas de otros países es que esta edad solo se ajustará en la proporción de dos tercios del aumento de la esperanza de vida.
Países Bajos. En 2022 la edad de retiro era de 66 años y siete meses, aumentando hasta alcanzar los 67 el próximo año. Será a partir de 2025 cuando se ajuste anualmente, en dos tercios, a los cambios de la esperanza de vida, como sucede en Finlandia.
Portugal. El país vecino tiene un sistema similar al de Finlandia y Países Bajos, con la particularidad de que los trabajadores con carreras de cotización completa (40 años) pueden reducir su edad legal de jubilación, de forma que por cada año que supere estos 40 años cotizados se descuentan 4 meses en la jubilación.
Malta. El sistema maltés no cuenta con un mecanismo de ajuste automático, si bien el Gobierno tiene la obligación de informar al Parlamento, cada cinco años, sobre la situación financiera del sistema de pensiones y proponer recomendaciones, para mantener la actual edad de 65 años.
Alemania. El sistema alemán cuenta con un sistema de puntos que el trabajador ha ido adquiriendo y acumulando durante su vida laboral y del valor que tenga el punto cada año. Aquí se introducen variables como la relación entre el salario anual y el salario medio. En el momento de la jubilación, los puntos se multiplican por el valor de cada punto, obteniéndose así la cuantía de la pensión inicial. En los siguientes años la cuantía se ajusta al alza o a la baja, en función del valor de cada punto, que dependerá del crecimiento de los salarios, los cambios de cotización y la ratio entre pensionistas y cotizantes.
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