Los sindicatos alertan de ajustes de empleo en los nueve hoteles de Silken comprados por Hotusa
Cuatro de ellos (Sevilla, Madrid, Bilbao y San Sebastian) suman más de dos tercios de la facturación, el empleo y la masa salarial de la cartera adquirida
Los sindicatos alertan del posible ajuste de empleo que se cierne sobre los 661 trabajadores de los nueve hoteles de la marca Silken que la cadena Hotusa ha comprado a Pygmalion y CBRE IM. Esos trabajadores, una vez que se formalice el contrato de compra, pasará...
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Los sindicatos alertan del posible ajuste de empleo que se cierne sobre los 661 trabajadores de los nueve hoteles de la marca Silken que la cadena Hotusa ha comprado a Pygmalion y CBRE IM. Esos trabajadores, una vez que se formalice el contrato de compra, pasarán a estar subrogados con sus condiciones previas en Silken en Hotusa. Los sindicatos consultados por Cinco Días advierten de que la subrogación solo sirve para garantizar a esos trabajadores las condiciones laborales que mantenían con sus anteriores sociedades durante tres años, pero no impide los despidos.
Paco Galván, responsable estatal del sector de Hostelería de CC OO, alerta de que se pueden producir salidas en los nueve hoteles de Silken a lo largo de los próximos meses a tenor de los diez años de conflictos laborales que han tenido con Hotusa. “Las amenazas y las coacciones son permanentes porque no quieren actividad sindical en sus hoteles, ya que les incomoda para llevar a cabo externalizaciones de personal, rebajas de salarios o descuelgues de convenio para recortar las condiciones de trabajo a través de las empresas de multiservicio”, recalca en alusión a los conflictos que han vivido en algunos de los establecimientos de la firma, como el hotel Reconquista en Oviedo o el antiguo hotel Dolce en Sitges. Preguntada por esas sospechas de ajustes de empleo, desde Hotusa precisan que por ahora “no tienen ninguna información acerca de la gestión de estas nuevas adquisiciones”.
Como ejemplo de mala praxis en materia laboral, Galván recuerda lo acontecido en el hotel Eurostars Magnificient Mile en Chicago, un activo adquirido por Pontegadea, el brazo inversor de Amancio Ortega en 2019, que posteriormente firmó un contrato de gestión con la cadena Eurostars. Solo un año antes del cambio de propietarios, los trabajadores del departamento de limpieza y mantenimiento del hotel se constituyeron como sindicato y se adhirieron a Unite Here Local 1, que representa a más de 15.000 trabajadores del sector hotelero del área de Chicago, e iniciaron las conversaciones para firmar un convenio sindical. “Esas conversaciones quedaron bloqueadas varios años porque tener un convenio suponía pagar siete dólares menos por trabajador y por hora”.
La joya de la corona está en Sevilla
El impacto de esos posibles ajustes no a va a ser igual en todos los hoteles, ya que cuatro de ellos (Al Andalus Palace en Sevilla, Puerta de Madrid, Indautxu en Bilbao y Amara en San Sebastián) representan una parte sustancial de la facturación, el empleo y la masa salarial. Así se desprende de los últimos resultados de las nueve sociedades de las que dependen, presentados en el Registro Mercantil, en los que se muestra que la auténtica joya de la corona de la cartera es el hotel Al-Andalus Palace, situado en Sevilla, con 623 habitaciones y 15.000 metros cuadrados de jardín, que registró una cifra de negocio de 21,3 millones de euros en 2024, lo que supuso un 34,5% de la facturación de los nueve hoteles comprados (61,6 millones). En el otro lado también es el inmueble que más empleados tenía (252 a cierre de 2024), un 38,4% de la cartera, y el que mayor masa salarial arrastraba, con 5,2 millones de euros, un 34% del total. Solo este inmueble supone el 40% del valor de la transacción (en torno a 100 millones de euros)
Del análisis de las cuentas de resultados de los nueve inmuebles se deduce también que cuatro de ellos (al de Sevilla se le unen los de Madrid, Bilbao y San Sebastián) suman el 73% de la facturación, del empleo y de la masa salarial, por lo que se van a convertir en el principal motor de ingresos en el futuro y al mismo tiempo en la principal fuente de ahorros en la búsqueda de sinergias. En términos de aportación a la cuenta de resultados, el hotel Indautxu de Bilbao se sitúa tras el hotel Al-Andalus Palace con 8,5 millones de facturación, 78 empleados y unos salarios que ascienden a 2,1 millones de euros, seguido muy de cerca por el hotel Amara de San Sebastián (7,7 millones de facturación, 68 empleados y una masa salarial de 1,9 millones de euros) y el hotel Puerta de Madrid, con una cifra de negocio de 7,3 millones, 82 empleados y unos salarios de 2,2 millones.