Eroski reducirá este año la deuda con los bancos por debajo de los 100 millones
La CEO del grupo prevé una inflación del 2% en el sector de la alimentación en 2025
Rosa Carabel, consejera delegada de Eroski, ha expuesto este martes en Bilbao los planes del grupo de distribución a corto y medio plazo. Entre los objetivos en 2025, reducir la deuda con los bancos por debajo de los 100 millones: ahora debe 112,8 millones a cinco entidades y con vencimiento a 2029. Estos acreedores son Kutxabank, Laboral Kutxa, ICO, Sareb y Mondragón Inversiones. Este último en la órbita de Corporación Mondragón, en la que también está integrada la cooperativa de Elorrio (Bizkaia). La intención es la de seguir reduciendo la deuda para poder realizar inversiones “sin apreturas”, según Carabel.
El pasivo total de Eroski se sitúa en los 671 millones, equivalente a 2,5 veces el beneficio bruto de explotación (ebitda). El grueso de la deuda está concentrada en una emisión de bonos de 500 millones, que suponen un coste financiero “elevado”, expuso Carabel. Con vencimiento también a 2029, tienen un interés fijo del 10,6255, pagadero cada semestre. En un encuentro organizado por la Asociación de Directivos y Profesionales de Euskadi (Adype), Carabel analizó la evolución de Eroski en los tres últimos lustros. El estallido de la crisis de 2007 le pilló tras cerrar la compra del grupo catalán del sector Caprabo por 1.000 millones, lo que disparó su deuda a los 3.414 millones en 2009, más de diez veces el ebitda.
Eroski afrontó una reconversión de su estructura, con la venta de tiendas a Carrefour, Lecrec y Dia, lo que le llevó de facturar 9.000 millones en 2009 a unos ingresos de 5.730 millones en 2023. Pasó por cuatro reajustes de la deuda, que tuvo que negociar con 22 bancos. Rosa Carabel destacó el compromiso de los socios de la cooperativa (unos 9.000 sobre una plantilla de 27.426 empleados). Afrontaron bajadas de sueldo y más horas de trabajo donde hiciera falta (muchos pasaron de las oficinas a reponer productos en los lineales o directamente a cobrar en caja a los clientes).
Esa reconversión se afrontó con un equipo de gestión de 30 personas, que ya eran 100 en 2023 y llegará a medio millar este año, con la intención de implicar en 2026 a los responsables de cada tienda (la cooperativa cuenta con más de 1.500 centros, de ellos 600 franquiciados). La CEO de Eroski prevé que la inflación este año del sector de la alimentación será del 2%, en línea con la subida general de precios. También calcula que esta industria crecerá un 3% en volumen de negocio en 2025. La cooperativa intensificará la presencia de las marcas blancas en sus lineales, así como las secciones dedicadas a productos frescos.
En su plan para el periodo 2024-2026, el grupo prevé invertir 450 millones y realizar 154 aperturas de tiendas, sobre todo en su zona norte, que incluye la costa cantábrica, Navarra, La Rioja, Aragón, Cataluña y Baleares. Este año pondrá en marcha entre 70 y 75 nuevos centros, incluidos los franquiciados. Sus mercados principales son Galicia (donde tiene una cuota del 20,3% en alianza con un grupo local a través de la sociedad Vegalsa), Euskadi (presencia del 35,9%) y Navarra (26,8%). También destaca su negocio en Baleares, donde controla el 20,5% del negocio de distribución que se registra en las islas. En Cataluña la cuota es del 4,5% y en toda España del 5,1%.
Como grupo intensivo en empleo, Rosa Carabel se quejó de la falta de profesionales para las secciones de carnicería, pescadería y frutería. Faltan hasta cajeros. Eroski realiza procesos internos de formación y tiene un programa de desarrollo profesional, en el que están incluidos los jefes de los supermercados, que pueden llegar a liderar equipos de un centenar de personas y gestionar unas instalaciones que facturan 15 millones al año.