Juego

Cirsa gana 50 millones hasta septiembre, un 33% más, pese a un peor tercer trimestre

Su rentabilidad entre julio y septiembre se resintió por los mayores tipos de interés que paga su última emisión de bonos

Sede corporativa de Cirsa.tonirebollo.com

Cirsa, la compañia de juego propiedad de Blackstone, cerró los primeros nueve meses de su ejercicio alcanzando un beneficio neto de 50,2 millones de euros, un crecimiento del 33% respecto al año pasado, pese a mermar su rentabilidad en el tercer trimestre.

Entre julio y septiembre, la ganancia neta de la compañía fue de 12,2 millones, casi la mitad que un año antes. Una contracción que se explica por el incremento de la factura financiera, que se encareció un 36% debido a los mayores intereses que paga la emisión con vencimiento a 2027 que lanzó en octubre del año pasado, por un montante de 425 millones y que paga un tipo del 10,375%. Además, reseña 2,9 millones en costes asociados a la las amortizaciones de la deuda senior que vencía en 2023 y 2025.

Por otra parte, la evolución del negocio sigue siendo positiva, con unos ingresos de explotación que alcanzaron los 1.475 millones al cierre de septiembre, un 20% más, con incrementos en todas las líneas de negocios. Ese incremento también se explica por la incorporación al perímetro de las compañías italianas E-Play 24 y Modena Giochi, esta útima incorporada en abril pasado, y que han elevado los ingresos en el negocio online en ese país.

Sin embargo, el ritmo de crecimiento en el tercer trimestre también fue inferior al de los periodos anteriores, con un alza ineranual de los ingresos del 8,6%, cuando en el segundo fue superior al 20%. La compañía reseña algunas alteraciones en su operativa habitual durante septiembre y octubre. En concreto, explica que su unidad de negocio de apuestas deportivas y juego online tuvo unos “resultados desfavorables” que impactaron sobre su margen, que ya muestra signos de recuperación en el tercer trimestre. Además, en los 10 últimos días de octubre, ya en el último trimestre, su actividad sufrió restricciones en Panamá por las protestas sociales que se dieron en ese país.

Además, también en octubre, dos casinos de Cirsa en Acapulco sufrieron daños por el huracán Otis, lo que obligó a su cierre temporal. La compañía espera poder reabrirlos antes de que acabe el año.

La compañía mantiene sus previsiones de cierre del ejercicio, que mejoró a cierre del semestre, y que apuntan a un ebitda de entre 615 y 625 millones. Hasta el tercer trimestre, este se situaba en 467 millones, un 17% mejor que hace un año. La deuda financiera neta se situaba a cierre de septiembre en 2.263 millones, y la caja disponible total era de 528,8 millones.


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