Nueva Pescanova anuncia un ERE para cerca de 100 empleados de sus servicios centrales

Defiende que el objetivo es “asegurar la sostenibilidad de la empresa a largo plazo”

Instalaciones de Nueva Pescanova en Redondela (Pontevedra).

Nueva Pescanova ha anunciado este martes su intención de ejectuar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) a cerca de un centenar de empleados de sus servicios centrales, en concreto de las oficinas de Chapela (VIgo) y Madrid. Lo hace justificando causas económicas y organizativas, después de cerrar el ejercicio fiscal 2022-2023 con unas pérdidas de 53 millones de euros.

La empresa ha comunicado la decisión hoy mismo a los comités de empresa y delegados sindicales. “El objetivo de la compañía es adaptarse a un entorno global desafiante y asegurar la sostenibilidad de la empresa a largo plazo”, dice en un comunicado, en el que no detalla la cifra exacta de empleados. Sí afirma que serán “menos de un centenar”, de los 10.000 que dan forma a su plantilla. “Todos ellos contarán con el apoyo y la orientación de la compañía durante el proceso”, dice la empresa, que afirma haber explotado “todas las alternativas posibles y tomado medidas para minimizar el impacto en sus equipos”.

Nueva Pescanova relaciona este movimiento con sus pérdidas del último ejercicio, motivadas por los mayores costes y la inflación, y por ello dice que es “imprescindible optimizar su estructura para adaptarla a un mercado que atraviesa un momento muy difícil. Nueva Pescanova busca, con estos ajustes, mejorar su posicionamiento en el mercado y mantener la excelencia en sus servicios y productos”.

Además de registrar una pérdida neta de 53 millones, su ebitda se redujo un 73% hasta 21,3 millones. Los costes de aprovisionamiento de materias primas, la electricidad o el impacto negativo de la depreciación del euro frente al dólar son los principales factores del deterioro de sus resultados, según explica la empresa en sus cuentas anuales.

En ellas, la compañía decía haber puesto en marcha un plan de contingencia para “reducir costes y adaptarse al aumento de la inflación y al contexto de tipos de cambio desfavorables”, aunque no detallaba las medidas concretas. En su memoria financiera, Nueva Pescanova señala su expectativa de poder recuperar en el año que ahora está en curso los niveles de ebitda del ejercicio 2021-2022, gracias a le recuperación de la operación de Nicaragua, una “mayor agresividad promocional” y unos precios adaptados a la “situación actual de costes”.

La compañía especializada en productos del mar está en pleno proceso de cambios, tanto a nivel ejecutivo como de propiedad. Esta anunció el pasado viernes el nombramiento de Jorge Escudero como nuevo consejero delegado tras la salida de Ignacio González. Este asume la posición mañana miércoles. Además, Abanca, propietaria de la compañía , mantiene negociaciones desde abril con el grupo canadiense Cooke para vender el 80% de Nueva Pescanova.

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