La venta de cigarrillos se acerca a mínimos de la pandemia tras las subidas de precios
El volumen de cajetillas comercializadas se contrajo un 2% en el primer trimestre
El mercado del cigarrillo en España vuelve a una tendencia de contracción en los volúmenes comercializados. El sector, que en 2022 todavía se encontraba en plena fase de recuperación de los niveles previos a la pandemia, volvió a caer en el primer trimestre de este año, como ponen de manifiesto las cifras que publica el Ministerio de Hacienda.
Entre enero y marzo de este año se vendieron un total de 484 millones de cajetillas de 20 cigarrillos en Península, Baleares, Ceuta y Melilla, una cifra un 2,2% inferior a la registrada en el mismo periodo del año pasado. Es, además, la cantidad más baja de la serie histórica para un primer trimestre no impactado por el Covid-19.
En 2021, los volúmenes vendidos fueron inferiores, de 475,2 millones, pero por aquel entonces persistían multitud de restricciones sociales para el control de la pandemia, que limitaron el consumo de tabaco fuera del hogar. Esa cifra supuso una caída de casi el 8% respecto al primer trimestre de 2020, pese a que este estuvo marcado, a partir de la mitad de marzo, por los confinamientos.
Lo vendido en el primer trimestre de este año, con una actividad social y económica ya recuperada es apenas un 2% superior a las cifras de 2021.
El motivo hay que encontrarlo en lasUn Cohiba en el estanco a precio de Hong Kong: así se ha disparado el precio de los habanos acometidas por los fabricantes en los últimos meses. Como tantos otros sectores de consumo, las tabaqueras han incrementado los precios de venta para compensar los encarecimientos en sus costes de producción.
Un caso claro es el de tres de las marcas más vendidas en España, Marlboro (Philip Morris), Camel (JTI) y Winston Classic (JTI).
Como ponen de manifiesto las estadísticas de Hacienda, el precio medio al que se vendió una cajetilla de Marlboro en marzo fue de 5,34 euros, un 9,2% más que en el mismo mes de 2022, cuando se situaba en 4,89. Camel, por su parte, se ha encarecido un 6,4% en el último año, de 4,84 euros a 5,15; y Winston Classic un 7,4%, de 4,75 euros a 5,1 la cajetilla.
Incrementos que tienen su efecto directo en las ventas. Marlboro, primera del ranking en España, ha retrocedido un 3,3% en el primer trimestre; Camel un 6,3% y Winston Classic un 13,5%. Del otro lado, Lucky Strike y Winston, que han mantenido estables sus precios, subían un 8% y un 9,4%, respectivamente.
Efecto de las subidas
Esos incrementos de precios sí se traducen en un alza de los ingresos, que compensan los menores volúmenes comercializados. Los cigarrillos vendidos en el primer trimestre generaron una facturación total de 2.355,8 millones de euros, casi un 4% superiores a las del mismo tramo de 2022.
Es, de hecho, la cantidad más elevada en 11 años, según los datos analizados. En 2012 la recaudación rozó los 2.500 millones, pero con unos volúmenes vendidos un 32% superiores a los actuales. En marzo de ese año el precio medio de la cajetilla era de 3,88 euros. En el de 2023, de 4,86, casi un euro más.
Las recargas de Iqos e Iluma venden un 31,5% más
Trimestre. Las ventas de las recargas de tabaco calentado para los dispositivos Iqos e Iluma, ambos de Philip Morris, crecían entre enero y marzo un 31,5% en valor. Entre ambas sumaban unos ingresos de 48,7 millones, la mayoría de los cuales generados por Terea, las recargas de Iluma, el dispositivo de nueva generación que el grupo tabaquero puso en el mercado hace un año. Por contra, las ventas de Heets, diseñadas para los dispositivos antiguos de Iqos caen de un año a otro un 85% por el trasvase a los nuevos modelos. Según la información que Philip Morris publicó al cierre de su primer trimestre fiscal, la cuota de mercado total de sus recargas de tabaco calentado dentro del mercado general del cigarrillo era del 2,1% en España, 0,6 puntos superior a la de un año antes.
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