Teknia busca su crecimiento por Norteamérica con la compra de empresas

El fabricante de componentes casi triplica beneficios y se sitúa por encima de sus niveles pre pandemia

Javier Quesada de Luis, director general de Teknia.

El fabricante de componentes de automoción Teknia se ha situado por encima de los niveles de negocio de la etapa pre pandemia mientras orienta su crecimiento por Norteamérica con la compra de empresas del sector. En 2022 batió el récord de ventas en sus 31 años de trayectoria industrial al facturar 384,6 millones (un 18,70% más que en 2021).

En las comparaciones con 2019, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) creció casi un 22%, al alcanzar los 40 millones, mientras que el resultado operativo neto (Ebit) fue de 23 millones, cerca de un 77% por encima del logrado en el año previo al estallido de la pandemia. En 2022, el margen Ebitda sobre ventas se situó en el 10,5%, dos puntos por encima del conseguido en 2019. Ya en la última línea del balance de 2022, Teknia casi triplicó los resultados de 2019 y alcanzó un beneficio neto de 16 millones.

Ante la incertidumbre que vive la economía internacional (Teknia tiene 23 fábricas en 13 países) y la subida de los tipos de interés, el grupo optó por reducir su nivel de apalancamiento con menos inversiones y situó su deuda financiera neta (DFN) en 1,8 veces el Ebitda, por debajo de su registro histórico, situado por encima de las dos veces.

Pero en 2023, Teknia invertirá 36 millones, la mayoría de ese presupuesto en la renovación de maquinaria productiva. Espera conseguir nuevos registros históricos de resultados durante el ejercicio en curso, según las previsiones de su director general, Javier Quesada de Luis. Todo dependerá de la estabilidad geopolítica a nivel mundial.

Al frente de la corporación que fundó su padre, el ejecutivo recordó las complicaciones para el negocio en 2022. Con una factura energética mensual disparada, “hasta cuatro o cinco veces por encima de la tarifa de otros años”, y con una alta inflación de las materias primas, Teknia pudo trasladar estas subidas a sus clientes, “pero no al 100%”. Y este impacto, “lo hemos absorbido con trabajo interno”, con mejoras de procesos y más eficiencia organizativa.

Alemania

En el ámbito inorgánico, Teknia compró en 2022 una empresa en Alemania que aportó tecnología de suspensión pilotada, la mejor para los coches autónomos y la que reduce los mareos de los pasajeros que no conducen. Un avance que Javier Quesada de Luis estima que incorporarán el 80% de los automóviles del futuro. Y este año adquirió otra compañía en Suecia, que refuerza la división de Teknia centrada en el aluminio, de menor peso pero más caro que el acero.

La nueva filial nórdica, denominada Svensk Tryckgjutning, factura 20 millones y tiene entre sus clientes a Mercedes-Benz, entre otras marcas.

Con más de 80 millones

Javier Quesada de Luis y su equipo sondean los mercados en busca de nuevas filiales que tengan una facturación anual de más de 80 millones y que estén centradas en la estampación y el mecanizado, con dos o más plantas en países distintos. Con prioridad a los grupos instalados en Norteamérica o en China. Para este mercado asiático, el primero del mundo con una producción anual de 30 millones de unidades, busca socios locales.

El director general de Teknia quiere obtener a largo plazo en Norteamérica el mismo nivel de ventas que en Europa. Con esta estrategia, ha reforzado su equipo ejecutivo con nuevas incorporaciones.

El crecimiento inorgánico de Teknia es constante. Ha gestionado más de veinte integraciones en tres décadas. En esta estrategia también tienen cabida compañías con un menor volumen de ventas, de unos 20 millones anuales, pero que aporten avances tecnológicos.

Teknia tiene contratado con Endesa y Engie el suministro de energía a largo plazo para cubrir la demanda de nueve fábricas en España, dos en México y otra en Brasil.

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