Obama, complacido por la recuperación de la industria automovilística
El presidente Barack Obama dijo hoy que está complacido por la recuperación de la industria automotriz de EE UU, y reiteró la necesidad de reformar la industria financiera a la que atribuyó la mayor responsabilidad por la crisis económica.
Al desatarse la recesión, la industria automotriz, uno de los ejes económicos del país, admitió que estaba al borde del colapso. Las más afectadas, junto con Ford, fueron General Motors y Chrysler, a las que el Gobierno decidió respaldar financieramente pese a las críticas.
"Muchos temieron que estábamos tirando el dinero, que los contribuyentes perderían gran parte de su inversión y que esas empresas quebrarían sin importar lo que se hiciera", dijo Obama en su habitual discurso de los sábados. "Pero un año después el panorama es muy diferente. En efecto, la industria se está recuperando a un ritmo que pocos pensaban que fuera posible", señaló.
Esta semana General Motors anunció que pagaría los préstamos y sus intereses con cinco años de anticipación y que no solo se ha recuperado sino que ha agregado 45.000 nuevas plazas de trabajo en sus plantas. Por otra parte, Chrysler también ha pagado los préstamos recibidos con sus respectivos intereses, señaló.
Además, Obama añadió que el rescate financiero de la industria, que "era absolutamente necesario para impedir un desastre económico todavía peor", costará al contribuyente una fracción de lo que se temió originalmente. Como resultado, la industria automotriz es ahora más estable y la economía se encuentra en una mejor situación, sostuvo.
Más transparencia financiera
El presidente indicó que parte de la crisis de esa industria y una de las principales causas de los problemas económicos del país surgieron del sector financiero. "Sin normas de sentido común, las empresas de Wall Street asumieron riesgos enormes e irresponsables que pusieron en peligro al sistema financiero y perjudicaron a casi todos los sectores de nuestra economía", manifestó.
Frente a esa situación, Obama planteó esta semana una reforma del sistema financiero cuyo objetivo es hacer más transparentes las operaciones de las empresas financieras y proteger a los consumidores.
Estas reformas para las que ha pedido el voto de republicanos y demócratas en el Congreso pondrán fin, "de una vez por todas", a los rescates que tienen que financiarse con dineros de los contribuyentes, manifestó. "Así es como restableceremos la confianza en nuestros mercados. Así es como ayudaremos a poner fin al ciclo de auge y crisis como la que hemos visto. Y así es como, después de dos años difíciles, no sólo reviviremos la economía, sino que ayudaremos a reconstruirla más fuerte que nunca", aseguró.