H&M deja un sabor amargo a Lagerfeld

Poco ha durado el idilio entre el diseñador de alta costura alemán, Karl Lagerfeld, y la firma de moda económica sueca Hennes & Mauritz: sólo cinco días. El modisto anunció ayer en una entrevista al semanario alemán Stern, que no realizará una segunda colección para la cadena. La democratización de una alta costura a precios asequibles parece no haber dejado satisfecho a Lagerfeld.

El malestar del mítico costurero de Chanel se reparte entre, al menos, dos razones: la edición limitada de su colección y el tallaje grande de los modelos: 'Yo diseñé moda para gente esbelta', comentó. De 'esnobismo desde el antiesnobismo' calificó la estrategia comercial de H&M, al haber sacado una edición tan limitada de sus modelos. En muchas tiendas, por ejemplo en Berlín o París, la colección se agotó a las pocas horas. España también vivió la fiebre del Lagerfeld aunque no se agotaran existencias el mismo 12 de noviembre, cuando más de 500 tiendas de la cadena en todo el mundo colgaron las codiciadas prendas de sus percheros.

Lo que hizo la empresa sueca, según el modisto, fue favorecer las tiendas de las grandes ciudades en detrimento de las pequeñas y del este del país (en referencia a Alemania). 'No produjeron suficientes prendas y no se pusieron a la venta ni en la mitad de sus tiendas', afirmó. Tal ha sido el enfado que dice que no le han quedado 'ganas de volver a hacer algo', ante el 'incomprensible gesto' de la firma sueca.

Así las cosas, la colección, auspiciada por un sonoro lanzamiento publicitario, queda como un experimento con final amargo. Los consumidores que se apresuraron el pasado 12 de noviembre a comprar una pieza del prestigioso diseñador por un precio que no superaba los 129 euros de la pieza más cara pueden presumir. No habrá más Lagerfeld para H&M, o eso asegura el modisto de melena blanca.

Las miradas se trasladan ahora a la recién anunciada colaboración entre Gaultier y la firma de venta por catálogo francesa La Redoutte.