Oki busca terrenos para abrir una planta en España

Un parque empresarial ubicado entre Zaragoza y Barcelona sería el lugar idóneo, según el fabricante japonés de impresoras Oki, para instalar una planta de ensamblaje en España. La decisión de invertir en nuestro país está tomada y, aunque con cierto retraso respecto a los planes iniciales, podría estar funcionando antes de que finalice 2004.

Oki, que cuenta con 24.000 empleados y 20 fábricas en todo el mundo, no ha desvelado la inversión prevista: 'Es un tema que llevan con bastantes reservas desde el Reino Unido', explica un portavoz. Pero reconoce la necesidad de atender la demanda de impresoras en el sur de Europa (especialmente la de Italia, Francia y España) con la mayor agilidad posible.

La filial española de Oki comunicó ayer sus resultados económicos, con una facturación de 110 millones. El crecimiento de ventas ha sido del 24,7% respecto a 2002 y ha mejorado en nueve millones las previsiones de principios de año. El beneficio operativo ha alcanzado los cuatro millones.

'Llevamos dos años apostando por un segmento concreto, la impresión láser a color, y éste ha aumentado más de un 300% en 2003', dice el consejero delegado de Oki Systems Ibérica, Javier Toledo. La empresa lidera ese área con un 43% de las ventas en España y espera crecimientos similares a los de este año para 2004 (la facturación prevista es de 121 millones).

Oki lanza nuevas familias de productos el próximo 1 de mayo. Uno de sus objetivos es consolidar sus ventas entre las pymes.