Más allá de lo convencional: el atractivo de la inversión alternativa
La agricultura sostenible y las herramientas de financiación alternativa para las empresas ofrecen oportunidades únicas
La inversión alternativa se ha instalado en la comunidad como un componente esencial en el conjunto de opciones disponibles para inversores institucionales y particulares por igual. Este enfoque, que va más allá de los tradicionales activos de renta variable y renta fija, ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, tanto en términos de tamaño de mercado como en especialización y sofisticación de productos.
Su explosión se inicia en un marco de tipos de interés muy bajos o incluso negativos que obligan a gestores e inversores a buscar posibilidades razonables para ...
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La inversión alternativa se ha instalado en la comunidad como un componente esencial en el conjunto de opciones disponibles para inversores institucionales y particulares por igual. Este enfoque, que va más allá de los tradicionales activos de renta variable y renta fija, ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, tanto en términos de tamaño de mercado como en especialización y sofisticación de productos.
Su explosión se inicia en un marco de tipos de interés muy bajos o incluso negativos que obligan a gestores e inversores a buscar posibilidades razonables para complementar la optimización de sus carteras. Así, el mercado global de inversión alternativa ha superado los 9 billones de dólares, con una tasa de crecimiento anual compuesta del 8% en los últimos cinco años. Este impulso no solo refleja el aumento en la disponibilidad de este tipo de productos, sino también la creciente demanda de los inversores en busca de oportunidades de diversificación y mayores rendimientos, en un entorno de mercado cada vez más complejo y competitivo.
Precisamente, uno de los principales atractivos de la vía alternativa es su capacidad para ofrecer una diversificación efectiva y un potencial de rendimiento superior en comparación con los activos tradicionales. La diversificación es una piedra angular de la inversión moderna y la alternativa ofrece acceso a una amplia gama de clases de activos y estrategias que pueden complementar y fortalecer las carteras.
Desde los iniciales fondos de private equity, con apuestas a largo plazo e iliquidez, en la actualidad, nos encontramos con un abanico de productos cada vez más especializados. Estos nuevos vehículos no solo amplían la gama de alternativas de inversión por temáticas, sino que también están intentando dotar de cierta liquidez a estos productos tradicionalmente cerrados, vía rentas periódicas y ventanas de liquidez.
En términos de rendimiento, este tipo de inversión ha demostrado consistentemente su capacidad para generar retornos atractivos en diversos entornos de mercado. Desde los primeros hedge funds, una de las categorías más prominentes de inversión alternativa, hasta los fondos especializados actuales, la mayoría han superado a los índices de acciones y bonos en términos de rendimiento ajustado al riesgo a lo largo de las últimas décadas, proporcionando así un valioso motor de rendimiento para las carteras diversificadas.
Los productos alternativos han ampliado, además, su alcance geográfico en los últimos años, permitiendo a los inversores diversificar aún más sus carteras y capturar las oportunidades de crecimiento en economías dinámicas y en evolución, dando un carácter mucho más global a sus inversiones.
Desde el punto de vista de las distintas estrategias, la inversión alternativa abarca una amplia gama de enfoques, desde el arbitraje de fusiones y adquisiciones hasta el trading cuantitativo y la inversión en activos reales como inmobiliario, infraestructura o agricultura. Estas estrategias pueden ofrecer exposición a diferentes fuentes de retorno y pueden ser utilizadas de manera complementaria para construir carteras bien equilibradas y resilientes.
Si nos centramos en dos de las estrategias que más valor diferencial han aportado en los últimos años, elegiríamos el negocio de la agricultura sostenible y supereficiente y las herramientas de financiación alternativa para las compañías (direct lending). Estas temáticas ofrecen oportunidades únicas de inversión que pueden proporcionar rendimientos atractivos y diversificación adicional a las carteras.
El agribusiness, que abarca actividades como la producción agrícola, la distribución de alimentos y la agricultura de precisión, ha experimentado un desarrollo significativo en los últimos años. Se estima que el tamaño del mercado global de inversiones en agribusiness supera los 150.000 millones de dólares, con una tasa de crecimiento anual del 9% en los últimos cinco años. Este aumento se debe en gran parte a la creciente demanda mundial de alimentos y productos agrícolas, así como a la evolución de tecnologías innovadoras en agricultura de precisión y biotecnología. Los inversores pueden acceder al sector agrícola a través de una variedad de vehículos, incluyendo fondos de especializados, ETF e inversiones directas en empresas agrícolas. Estas inversiones pueden proporcionar exposición a un sector en auge y ofrecer rendimientos atractivos a largo plazo, aportando una descorrelación clara con el resto de los mercados tradicionales y con una protección natural a la inflación.
Por otro lado, el direct lending, que permite el acceso a la financiación alternativa como temática de inversión, ha surgido como una clase de activo atractiva para los inversores en busca de ingresos estables y predecibles. Esta temática ha experimentado un crecimiento igualmente notable en los últimos años. Se estima que el mercado global de inversiones en créditos privados supere los 300.000 millones de dólares, con una tasa de crecimiento anual del 7% en los últimos cinco años.
Este desarrollo se debe, en parte, a la creciente demanda de financiación alternativa a los bancos por parte de empresas y particulares, así como a la búsqueda de rendimientos estables y predecibles por parte de los inversores en un entorno de tasas de interés históricamente bajas. Los inversores pueden participar en el sector de créditos a través de fondos de crédito privado, fondos de deuda directa y otras estrategias de crédito estructurado. Estas inversiones pueden ofrecer rendimientos atractivos y diversificación a las carteras, así como protección contra la volatilidad del mercado de valores. Normalmente, son productos con duraciones más cortas que el private equity tradicional y la mayoría prevén el pago de rentas periódicas a lo largo de la vida de la inversión.
Podemos concluir que la inversión alternativa representa una parte fundamental y cada vez más importante del panorama financiero global. Con su capacidad para ofrecer diversificación efectiva, rendimientos atractivos y acceso a oportunidades diversificadas, esta estrategia desempeña un papel crucial en la construcción de carteras de inversión robustas y bien equilibradas. Los inversores deben comprender y considerar la opción alternativa como parte integral de su estrategia de inversión a largo plazo.
Fernando de la Vega es ‘managing director’ de Beka Asset Management
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