La banca defiende que la sostenibilidad también pasa por reducir la exigencia de las normas europeas
La banca considera que las políticas en favor de la descarbonización ponen trabas a la competitividad y reclama cambios más graduales para adaptarse
El sector financiero español sostiene que la descarbonización de la banca puede lograrse sin la necesidad de una regulación estricta. Las principales asociaciones del sector, como la Asociación Española de Banca (AEB) o la CECA, reunidas este miércoles en el quinto encuentro anual del Centro de Finanzas Sostenibles y Responsables de España (Finresp) en Madrid, han manifestado que las políticas europeas de descarbonización afectan la competitividad de la banca y han pedido “cambios más graduales” para evitar que los bancos europeos pierdan terreno frente a sus competidores estadounidenses.
José María Méndez, presidente de Finresp y director general de CECA, la patronal de las antiguas cajas de ahorro, ha destacado que la sostenibilidad en el ámbito de la Unión Europea “no puede ser solo requerimientos regulatorios cada vez más estrictos”, sino que debe ir más allá y verse como un motor del crecimiento económico y la creación de empleo. Según ha asegurado, el sector financiero ha enfrentado una “intensa oleada reglamentaria” desde 2019, en asuntos como los “envases, la deforestación o las emisiones de gases de efecto invernadero”.
Uno de los marcos regulatorios criticados por la banca es el Reglamento de Divulgación de Finanzas Sostenibles (SFDR, por sus siglas en inglés), que exige a las instituciones financieras informar sobre cómo integran los riesgos de sostenibilidad en sus procesos de inversión, pero que el sector considera costosa y compleja. Por esta razón, las asociaciones bancarias han pedido que el paquete ómnibus, aprobado por la Comisión Europea a finales de febrero, para simplificar las normas sobre sostenibilidad y mejorar la competitividad en otros sectores, también se aplique a la banca. Méndez ha subrayado que la sostenibilidad tiene que adaptarse “a la realidad de nuestras empresas y al contexto geopolítico”.
En la misma línea, el consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, ha lamentado los impuestos a las energéticas y los bancos: “No hay que ser fundamentalistas. Los cambios deben ser graduales”. Al igual que Méndez, Gortázar ha destacado la complejidad que genera la regulación actual y ha abogado por reducir los procedimientos regulatorios. En lugar de reforzar las regulaciones, Gortázar cree que hay que invertir en la transición energética, ya que España tiene, según él, una “ventaja competitiva considerable en el desarrollo de energías renovables”.
En cuanto a la postura del regulador, Paloma Marín, vicepresidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), ha subrayado que España cumple con los estándares europeos y podría convertirse en “modelo europeo de finanzas sostenibles”, aunque ha reconocido que el llamado ecopostureo (greenwashing en inglés) puede hacer perder la confianza en los inversores. Marín ha destacado que, a pesar de que el crecimiento de los fondos sostenibles ha sido moderado —se contabilizaron 373 fondos en marzo y 367 en diciembre, lo que representa un crecimiento del 2% en cuatro meses—, el movimiento sigue siendo en positivo. La ponente ha hecho hincapié en el resto de los aspectos de las políticas ESG, como los avances en la diversidad social y de género en las empresas del Ibex 35, donde el 43% de los miembros de los consejos de administración son mujeres.
Por su parte, Juan Carlos Delrieu, director de la Oficina de Supervisión del Banco de España, ha considerado que las regulaciones han “empachado” al sector bancario y que se necesita una mayor armonización en las regulaciones para evitar que los bancos se vean sobrecargados. El ponente ha destacado que habría que invertir para mejorar la información climática y medioambiental, mediante el uso de datos satelitales y la incorporación de escenarios dinámicos que puedan reflejar con mayor exactitud las proyecciones a largo plazo y los riesgos que enfrentaría la banca.
Crear bancos de mayor tamaño en Europa
En cuanto al consejero delegado del Banco Sabadell, César González-Bueno, ha indicado durante el encuentro que la banca europea está en desventaja frente a la competencia estadounidense por el tamaño de sus bancos. Sin embargo, ha afirmado que este problema no se puede abordar “exclusivamente desde un punto de vista local”, refiriéndose a la opa del banco BBVA sobre la entidad catalana pendiente aún de las resoluciones previas de los reguladores.
El CEO de Sabadell ha subrayado que una de las soluciones para afrontar el cambio climático sería crear un “proyecto europeo más robusto” y fomentar “bancos transfronterizos” que sean capaces de ver más allá que el mercado nacional y puedan competir con Estados Unidos. Sin embargo, ha insistido en que las fusiones nacionales no son la solución ya que afectan a la competencia.