Encarna Piñero, la maratoniana que va a revolucionar el todo incluido de lujo caribeño
Esta apasionada de las maratones dirige un gigante hotelero desde 2017 al que pretende convertir en un referente en sostenibilidad
Encarna Piñero lidera la segunda generación de la familia Piñero, que creó a partir de una modesta agencia de viajes en Murcia nacida a principios de los setenta un imperio turístico con el turoperador Soltour y los hoteles Bahía Príncipe al frente que factura, 53 años después, 850 millones de euros y que ha entrado en el top 10 de las empresas hoteleras en España.
Consejera delegada del grupo desde 2017, es una apasionada de las maratones, a las que declara tanta pasión como a su profesión. Solo ...
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Encarna Piñero lidera la segunda generación de la familia Piñero, que creó a partir de una modesta agencia de viajes en Murcia nacida a principios de los setenta un imperio turístico con el turoperador Soltour y los hoteles Bahía Príncipe al frente que factura, 53 años después, 850 millones de euros y que ha entrado en el top 10 de las empresas hoteleras en España.
Consejera delegada del grupo desde 2017, es una apasionada de las maratones, a las que declara tanta pasión como a su profesión. Solo de esa manera se explica el hito que logró tratando de hacer coincidir en septiembre de 2020 sus 50 años con el 50 aniversario de la maratón de Nueva York, sin haber corrido previamente. La pandemia lo impidió, ya que no pudo entrar en territorio estadounidense por las restricciones derivadas de la crisis sanitaria del coronavirus, pero eso no la frenó para alcanzar su objetivo un año después. “Así que corrimos la maratón de Barcelona, después Roma y finalmente Nueva York. Tres maratones en un año. Ni yo misma me lo creo”, recalcaba en su perfil de LinkedIn, en el que se define como “mujer, madre, empresaria y runner”.
Toda una declaración de intenciones. Una afición que roza ya lo obsesivo y que se ha convertido en un modo de vida integrado en su trabajo. “A nivel personal, además, he tenido la fortuna de correr la maratón de Nueva York, y digo fortuna porque cada día agradezco la energía, la disciplina y la fuerza que me da el deporte”, señalaba en su mensaje de felicitación por la llegada de 2023. En 2021 acabó los 42 kilómetros y 195 metros en formato virtual en poco más de 4 horas y 1 minuto, mientras que en 2022, ya presencial, empeoró su marca hasta las 4 horas y 37 minutos. El pasado domingo se corrió la edición número 53 y Encarna no pudo quitarse la espinita clavada. Quizá para 2024.
Uno de sus más estrechos colaboradores elogia su cercanía, su accesibilidad y su capacidad para delegar en sus equipos. “Confía mucho en la gente con la que trabaja. En muchas ocasiones, los propietarios se meten en el negocio y tienen esa necesidad de conocer hasta el último detalle. Ella respeta mucho a sus mandos intermedios y nunca impone nada”. Un modelo diametralmente opuesto al de su padre, Pablo Piñero, que puso en el mapa una compañía que se convirtió en la principal turoperadora de viajes de calidad a precio asequible al Caribe a costa de estar las 24 horas del día atento a cada uno de los episodios que vivía la empresa. “Me ocurrió más de una vez de estar en un encuentro entre empresarios hoteleros y verle levantarse para negociar un vuelo que se había quedado sin plazas o tratando de cubrir unos asientos que no se habían ocupado”, recuerda un directivo hotelero que trabajó con él codo con codo a comienzos de la década de los ochenta. “Todo lo llevaba él, pero siempre con su mujer, Isabel García, detrás. Fue una asistente fiel y una de las principales razones que hizo prosperar el negocio”, subraya este empresario. Ahora, el organigrama está mucho más descentralizado: Isabel es la presidenta del grupo, Encarna ejerce las labores ejecutivas como vicepresidenta y consejera delegada y sus otras dos hermanas (Isabel y Lidia) se encargan de las áreas ligadas a sostenibilidad y a inversiones.
Uno de los mayores empleadores en República Dominicana
Gestión ambiental. Grupo Piñero invirtió 2,7 millones en 2022 en acciones ligadas a la gestión ambiental de los hoteles y del entorno donde están situados. En esos doce meses logró una reducción del consumo energético por estancia del 35% y duplicó la cantidad de residuos reciclados hasta las 1.000 toneladas.
Empleo. Es uno de los mayores empleadores en República Dominicana, con más de 8.000 trabajadores, de los que 700 trabajan en el complejo de Cayo Levantado.
El plan de futuro que maneja Encarna para el Grupo Piñero es transformarlo de un referente para los viajes en familia y en pareja a un ejemplo a seguir del turismo todo incluido de lujo y sostenible en el Caribe, donde cuenta con trece hoteles en República Dominicana, cuatro en México y dos en Jamaica. Para ello, ha ido forjando alianzas con distintos operadores para ir adaptando su oferta a ese perfil de cliente de mayor poder adquisitivo y más concienciado con el medio ambiente. Un primer hito de esta estrategia fue la firma de un pacto en 2020 con la Asociación de Golfistas Profesionales de América (PGA of America) que suponía, entre otras cosas, la entrada en Latinoamérica del PGA, que cuenta con más de 29.000 socios y tiene como objetivo impulsar la práctica del golf en el Caribe a través de la creación de experiencias únicas vinculadas con este deporte. Solo un año después anunció la creación de una alianza estratégica, a través de su marca Turiscar Ecotrain, con QEV Tech Holding, para ofrecer soluciones de movilidad sostenible basadas en la electromovilidad en sus hoteles.
Y el exponente de ese futuro de todo incluido de lujo es Cayo Levantado, el resort de megalujo en República Dominicana que abrieron el pasado verano sobre la estructura de un antiguo Bahía Príncipe abierto en 2006 y que ha sido remozado de arriba a abajo con una inversión de 40 millones de dólares. El hotel y todas sus instalaciones ocupan una isla privada, a través de la cual se reparte un complejo con 218 habitaciones y una oferta ligada al todo incluido con seis restaurantes de comida local e internacional, siete bares, un área de wellness, dos piscinas, spa, outdoor box al aire libre, un estudio de entrenamiento personal y un salón de belleza. “«Nos gustaría que Cayo Levantado hiciera eco en el sector turístico, no solo en la República Dominicana, sino también en los demás destinos del Caribe, para que vengan a ver cómo lo estamos haciendo y lo puedan replicar», enfatizó Piñero durante la presentación del complejo.
“De las tres hermanas es la más parecida a Pablo Piñero en su faceta de animal social. Es una excelente relaciones públicas, es muy persuasiva y tiene grandes dotes de convicción”, destaca otro empresario de la competencia. En 2018 fue nombrada presidenta de la Asociación de Inversionistas Españoles en Turismo del Caribe (Inverotel), cargo que aún conserva y desde el que mantiene una interlocución directa con el Gobierno dominicano.
El último proyecto que quiere arrancar Piñero es el de la división residencial para combinar el uso hotelero y privado en los complejos que explotan. Por ahora poseen dos grandes complejos residenciales: Playa Nueva Romana, situado en La Romana (República Dominicana), y Tulum Country Club, ubicado en Tulum (México). Entre ambos suman casi 3.000 viviendas construidas en más de 1.200 hectáreas y cuentan con más de 5.000 residentes, todos ellos con un alto poder adquisitivo, procedentes en su mayoría de República Dominicana, México o Estados Unidos.
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