Meliá sale de pérdidas y ganó 120 millones de euros en 2022
La hotelera anticipa un crecimiento de las reservas del 25% hasta verano y prevé al menos 30 aperturas para este año
La recuperación del turismo ha sido balsámica para la cuenta de resultados de la primera hotelera española. Tras dos años de pérdidas, la compañía se acercó a las cifras de facturación precrisis y volvió a tener beneficio, todo ello pese a que el primer trimestre contribuyó de forma negativa por el impacto de la ola ómicron. En 2022, los ingresos crecieron un 87,5% anual hasta los 1.692 millones de euros, tan solo seis puntos por debajo de 2019, mientras que el resultado de explotación se disparó un 243% anual hasta los 431 millones de euros y el beneficio neto fue de 120 millones de euros.
Las perspectivas para este ejercicio son igual de optimistas sobre todo en las reservas en libros. “Registran crecimientos superiores al 25% respecto a las registradas en las mismas fechas de 2019, no sólo para las del primer trimestre, sino muy positivas también para la Semana Santa y el verano, al apreciarse un incipiente retorno de las reservas anticipadas y a medio plazo, frente a las de ‘último minuto’ que continúan siendo mayoritarias”, apuntó Gabriel Escarrer, consejero delegado de Meliá. Una tendencia que se puede comprobar en las ventas de las agencias online y los turoperadores, que ya han bloqueado el 45% de las camas que tenían disponibles para verano. Escarrer avanzó que la recuperación de la cuenta de resultados “nos permitió mantener la confianza de propiedades e inversores de todo el mundo y sostener un fuerte ritmo de crecimiento con la firma de 33 nuevos hoteles”, de los que al menos 30 abrirán sus puertas este año. Las inauguraciones previstas hasta ahora se centran en Europa, con diez nuevos activos, Caribe (8), África y Oriente Medio (4), América (4) y Sudeste Asiático (3).
El fondo canadiense Global Alpha duplica su peso en el capital y ya controla el 10,14% de la compañía
Meliá destacó la fuerte recuperación de algunos de sus mercados emisores más importantes, como EE UU, Canadá y Europa Central y del Norte, “que está impactando muy favorablemente en la evolución de los hoteles en México, República Dominicana, Cuba, Canarias y Cabo Verde durante el primer trimestre del año”. Más lenta será la reactivación en el caso de China, prevista para el segundo semestre, una vez que se ha iniciado la recuperación con la reactivación de emisores como Corea, Japón y Australia.
En la nota de presentación de resultados, la compañía destacó el aumento de participación de dos accionistas significativos del grupo, como el holding Hoteles Mallorquines Agrupados, sociedad participada por la familia Escarrer, que incrementó su participación en medio punto porcentual, y el fondo canadiense Global Alpha, que tras las últimas adquisiciones “ha pasado del 5,118% al 10,14% del capital a enero de 2023″.
El único “pero” de la cuenta de resultados es el fuerte volumen de endeudamiento, que tan solo se redujo en 180,2 millones en 2022. En el pasado ejercicio estaba prevista otra gran desinversión como la que se realizó en 2021 y con la que obtuvo 204 millones de euros. Los hoteles que iban a entrar en la venta que finalmente no se han realizado estaban en el Caribe. La hotelera espera poder reactivar esa venta en breve. “Junto con la generación de caja operativa y con el fin de reducir el apalancamiento financiero, la compañía trabajando en la vía de la venta de activos”.
Escarrer ganó un 5,1% más frente al alza del 6,2% de los empleados
La recuperación del beneficio y la fuerte subida de ingresos, cercanos a la pandemia, que experimentó Meliá durante el pasado ejercicio no se transmitió de forma directa a la remuneración percibida por el consejero delegado, Gabriel Escarrer. En 2022 recibió una retribución global de 1,46 millones de euros, lejos de los 2,9 millones que ganó en 2019.
En el desglose por conceptos, 1,27 millones correspondieron a rentas en metálico, 76.000 euros a la remuneración por sistemas de ahorro y 9.000 a otros conceptos. A esas tres partidas hay que sumar los 108.000 euros cobrados en metálico en otras sociedades del grupo. De los 1,27 millones que cobró en metálico, 761.000 euros correspondieron al salario, 457.000 euros a la retribución variable, 32.000 a dietas y 22.000 en remuneración fija.
El salario de Escarrer subió un 5,17% anual, por debajo de la actualización del 6,25% de los empleados, que pasaron de una media anual de 16.000 a 17.000 euros brutos, recuperando el nivel que perdieron en 2020.
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