Cuando ya no hay nada que perder, y solo queda tirar para adelante y jugarse los pocos cuartos que le quedan a uno en el bolsillo, siempre aparece una oportunidad, por pequeña que sea.Y Jorge Dávila, avalado por su experiencia en sala en Zalacaín, en La Nueva Fontana, Piñera, Álbora y en A’barra –en estos dos últimos era el director cuando recibieron la estrella Michelin–, y Óscar Portal, fogueado en las cocinas del Gran Casino de Madrid, Pedralbes, Zalacaín, Akelarre y Piñera, y en los hoteles St Regis de Ciudad de México, el Hermitage en Andorra o Casa Cook en Ibiza, encontraron la ilusión donde menos la esperaban: en la cafetería de un club de pádel, Mad4Padel, en Pozuelo de Alarcón (Madrid).
En plena pandemia y canícula del mes de agosto, iniciaron el proyecto más arriesgado de sus vidas, el de transformar la barra de un bar, que servía sándwiches mixtos a los socios y jugadores del club, en un espacio de interés gastronómico. Así nació Volea, un restaurante que en menos de un año se ha convertido en una dirección concurrida, con una carta bien concebida y una buena relación calidad-precio, teniendo en cuenta al alto nivel de los productos que aquí manejan.
Disponen de dos cartas, para barra y restaurante, con platos desenfadados, sencillos y aptos para todos los miembros de la familia. Desde croquetas de jamón (8 euros), hamburguesas de vaca vieja (14 euros) a un mollete de calamares con mayonesa de jamón ibérico (14 euros).
Pero si hay algo que destaca por encima de todo, y que cuenta los fines de semana con una parroquia fiel, son los arroces (de la marca Bombita): del senyoret seco, con rape y calamares, de verduras (cada uno, 16 euros), de pichón y butifarra negra, el meloso de chipirones, ajetes y cigalas, o el fideo rosso, con gamba roja y alioli (los tres, a 18 euros).
Tienen buenas anchoas, que acompañan con una salsa de trufa y mantequilla (16 euros), una semiconserva de zamburiñas con mojo picón (20 euros) o una costilla de ternera con crema de ajos y chalota al cava (20 euros). De postre, tarta de queso (6 euros). Buena selección de vinos.