Aeropuertos

Una torre de control sin torre, en una oficina y a cuatro kilómetros del aeropuerto

Un sistema de Indra permitirá controlar desde una oficina el tráfico aéreo de Budapest

Torre de control del aeropuerto de El Prat, en Barcelona.Quique García (EFE)

Los aeropuertos van a perder una de sus construcciones más características: las torres de control. Hoy ya no es necesario construir una infraestructura que dependiendo del tipo de aeropuerto y de su morfología puede ser de entre 60 y 70 metros de altura.

Así lo defiende la empresa española Indra, que ha comenzado a desarrollar e instalar en el aeropuerto de Budapest un sistema de control aéreo de torre remoto sin necesidad de apoyarse en una torre de control física. El sistema estrá operativo el año que viene.

La idea no es nueva, ya se prueba, con desigual resultados, en varios aeropuertos regionales y con poco tráfico de todo el mundo, pero es la primera vez que se pone en marcha en un gran aeropuerto europeo. Las autoridades húngaras de navegación aérea se enfrentaron a un dilema a raíz de que el aeropuerto de su capital había crecido hasta tener ya una extensión de más de 3 kilómetros de longitud.

La torre que controla hoy despegues, aterrizajes, campo de rodadura y parking de aviones se quedó pequeña y desde dento no se alcanzaba a ver toda la operativa de las aeronaves. El dilema era construir una nueva o instalar un sistema de control remoto. “El coste de construir una torre de control viene a ser de media un millón de euros por cada metro de altura. Hablamos de una torre normal sin grandes pretensiones, si ya quieres que te la diseñe un arquitecto de renombre y fama internacional los precios se disparan”, asegura un alto responsable de Indra consultado por Cinco Días.

“El aeropuerto de Budapest-Ferenc Liszt necesitaba como mínimo construir una torre de 70 metros de altura para tener acceso visual de todo el campo. Hizo números y vió que la solución de torre remota le salía un 80% más barato. Así que se lanzó el concurso, competimos y ganamos el contrato”.

Cámaras instaladas por Indra en un aeropuerto para control aéreo

A través de un complicado sistema de cámaras instaladas a su vez sobre siete torres metálicas se accede a una visual completa de todo el aeropuerto. Estas cámaras de altísima resolución generan una señal cada una de ellas que se compacta y se envía a donde se quiera instalar lo que se podría llamar la nueva torre virtual, “que no es más que una sala de pantallas, con un enorme ‘videowall’, en el que se vigila la actividad del aeropuerto en 360 grados y proporciona a los controladores una vista con dimensiones de los objetos igual que lo verían desde una torre de control física.

En el caso de Budapest, esta sala, “que no parece más que una oficina, está situada a cuatro kilómetros del aeropuerto. Eso si para llevar la señal de televisión que generan las cámaras necesitamos una instalación de fibra óptica de altísima velocidad, dedicada solo a este fin, ya que la señal en 4K no se puede ver interrumpida ni congelada. No puede pixelarse ni discurrir a trompicones. Estamos hablando de seguridad aérea y con un tema así no caben soluciones que no sean de altísima calidad”.

Pantallas de la torre virtual del aeropuerto de Budapest

Por ello, aseguran los expertos consultados si contamos con esa fibra instalada podemos llevar la señal y por tanto controlar el tráfico de cualquier aeropuerto a distancia. Es una solución ideal para solventar el control aéreo de aeropuertos muy remotos a los que es complicado y caro trasladar controladores aéreos. Es el caso, por ejemplo de lo que se quiere hacer en el archipiélago de las Azores, explican, “en este caso las autoridades de Portugal va a centralizar en una solo torre virtual el control de la actividad aérea de aeropuertos pequeños de cinco islas”.

Un aeropuerto en el desierto con control remoto

Arabia Saudí. El  próximo reto de Indra en este campo es instalar el mismo sistema en el aeropuerto Red Sea en Arabia Saudí, diseñado por el estudio del arquitecto Norman Foster. “Cuando vieron el mástil que utilizamos, que no es más que una torre metálica en la que van montadas las cámaras, entraron en pánico. No encajaban para nada en un aeropuerto de alto diseño. Pero ese es nuestro producto, aunque luego ese armazón lo puedes vestir como quieras para que se integre”.  
Aena. Aunque ninguno de ellos está siendo diseñado por Indra en España hay dos proyectos en marcha de torre remota. Aena ha decidido empezar por el aeropuerto de Vigo y en el de Menorca. Aún no están operativos.

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