País Vasco

Arenas amenaza con recurrir el Presupuesto vasco de 2003

Desde la sede central del PP en Madrid, Javier Arenas advirtió ayer al lendakari que las cuentas vascas del año que viene pueden terminar, como ocurrió con las ahora vigentes, ante el Tribunal Constitucional. En esta ocasión se dan circunstancias parecidas a las del año pasado. El Gobierno tripartito formado por el PNV, EA e IU carece de mayoría para sacar adelante los Presupuestos y, de momento, no tiene el apoyo añadido de ninguna fuerza política para hacerlos prosperar.

El año pasado Batasuna sólo ofreció su respaldo a las partidas presupuestarias que le interesaban. El resultado fue que el Parlamento consiguió aprobar en medio de una gran polémica el 70% de los Presupuestos, obligando al Ejecutivo autonómico a sacar el resto de las partidas adelante mediante créditos adicionales en capítulos tan importantes como los de Interior e Industria.

Los Presupuestos que defiende para 2003 el Gobierno vasco ascienden a casi 7.000 millones de euros. Javier Arenas emplazó ayer al PNV a ser 'respetuoso' con el trámite parlamentario para 'no tener que recurrir nuevamente'. El ministro añadió que el PP 'no contempla' un escenario de adelanto electoral en el País Vasco ni siquiera en el supuesto de que no fueran aprobados los Presupuestos, a pesar de que se encuentre 'defraudado gran parte' del electorado nacionalista por 'la carrera a toda velocidad' del PNV hacia el voto de Batasuna.

Conferencia Episcopal

El portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz, rechazó ayer una valoración concreta del documento emitido el pasado viernes por la Conferencia Episcopal sobre Euskadi. No obstante respaldó implícitamente el rechazo que este documento mereció a los obispos del País Vasco. 'Gracias a Dios, en estas materias, el referente para la sociedad vasca es y ha sido siempre la Iglesia vasca. Lo mismo hoy que hace 66 años', afirmó Imaz.

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, también rechazó ayer la pastoral de la jerarquía eclesiástica, pues, en su opinión, comparte el 'patriotismo constitucional' del que hace gala el Partido Popular.

'Yo ante el patriotismo constitucional tengo unas ciertas reservas, sobre todo porque a veces tengo la sensación de que se utiliza de manera abusiva; a veces incluso se mete ahora, estos últimos días, en el documento de los obispos', comentó Pujol. En la misma línea crítica se situaron ayer los socialistas catalanes.

El ministro de Ciencia y Tecnología y presidente del PP de Cataluña, Josep Piqué, declaró ayer que resulta 'preocupante' que CiU no comparta la reciente pastoral publicada por la Conferencia Episcopal.

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