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Crisis en Ucrania

El dinero se refugia en las divisas 'blindadas', los bonos y el oro

El dólar, el yen y el franco suizo reciben el dinero mientras el dinero vuelve a la renta fija soberana

La aversión al riesgo y las expectativas de que los bancos centrales se tomen un respiro en proceso de normalización monetaria fue un balón de oxígeno para la deuda. Los inversores que en este comienzo de año habían acelerado la venta de bonos vuelven a buscar cobijo en la renta fija. Esto se tradujo en una caída de las rentabilidades y la consiguiente subida en precio. El bono español bajó al 1,179% desde el 1,2% previo mientras el bund se desfondó hasta el 0,172% y la deuda estadounidense con vencimiento en 2032 se aleja de la barrera del 2%. Los recortes experimentados por los rendimientos son los mayores desde el pasado noviembre cuando la variante ómicron y la vuelta a las restricciones aceleró la salida de los fonos de la Bolsa a la deuda.

“Dado que la economía de europea es mucho más dependiente del suministro energético de Rusia, cabría esperar una mayor presión sobre los rendimientos europeos en comparación con los Estados Unidos. Para la deuda soberana esperamos un aplanamiento en el extremo más largo de la curva (10 y 30 años) y nos hemos vuelto más cautelosos con los bonos corporativos europeos”, afirma Stefan Kreuzkamp, jefe de inversiones para DWS.

Las recientes presiones inflacionistas aceleradas por el aumento de los precios de las materias primas se combinan con la preocupación por los riesgos de una desaceleración económica. Es decir, el temido fenómeno de estanflación vuelve a primera línea.

Pero no solo la deuda sirvió ayer de escudo a los inversores. Activos refugio como el oro volvieron a brillar con luz propia. En las dos últimas sesiones el metal amarillo se revaloriza un 1,31%, hasta los 1.923,46 dólares la onza, máximos de 13 meses, pero lejos aún del récord de 2.063,54 dólares que llegó a registrar en agosto de 2020.

En las divisas, el yen japonés y el franco suizo también actúan como activos refugio, con una subida de la moneda nipona del 0,31% frente al dólar, hasta las 115,37 unidades por billete verde, mientras que la moneda suiza sitúa en 0,9249 unidades por dólar, con una subida cercana al 1%. Además de las conocidas como divisas blindadas, el dólar se vio reforzado en su cruce frente al euro. Al cierre de los mercados europeos, la divisa única retrocedía un 1,25%, hasta los 1,116 billetes verdes, mínimos de un mes.

Los analistas de MUFG sostienen que "el conflicto probablemente alentará a los de los mercados a reducir las expectativas de endurecimiento monetario de los de los principales bancos centrales a corto plazo". "Esperaríamos que los mercados de tipos del Reino Unido y Estados Unidos sigan ajustando las expectativas a favor de subidas menores de 0,25 puntos en sus  próximas reuniones de marzo", añaden en declaraciones a Reuters.

Araceli de Frutos, EAF 107, en esta línea, avisa de que "a situación puede que cambie, ya que ante estas caídas de mercado y conflicto geopolítico los bancos centrales tendrán más difícil implementar la normalización de política monetaria, la subida de tipos oficiales, y puede que estas expectativas se moderen".

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