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El descenso de Podemos y sus confluencias otorga a la derecha cinco de los mayores 20 ayuntamientos

La subida del PSOE, insuficiente para las izquierdas, que solamente se hacen con Gijón

Europa Press

La erosión de los ayuntamientos del cambio ha provocado las mayores alteraciones de poder municipal en las elecciones locales, tres de las cinco mayores ciudades de España cambiando de alcalde. En los tres casos se trataba de una marca cercana a Podemos: Manuela Carmena no podrá gobernar Madrid, Ada Colau se ha quedado a un puñado de votos de revalidar Barcelona y en Zaragoza la alcaldía de izquierdas que lideraba Pedro Santisteve no podrá repetir. En una constante repetida en todas las grandes ciudades, el PSOE mejor sustancialmente sus resultados de 2015, pero el descenso de Podemos y sus confluencias provoca que pierda varios consistorios: En Alicante y Córdoba los partidos de derechas suman mayorías suficientes para conseguir la alcaldía, mientras en Granada todo dependerá de pactos postelectorales. El único gran ayuntamiento que recupera la izquierda es el de Gijón.

Pese a perder 6 escaños con respecto a los resultados de 2015, previsiblemente Jose Luis Martínez Almeida será el próximo alcalde de Madrid. Para ello necesitará reeditar el pacto que llevó al PP a gobernar la Junta de Andalucía, junto a los 11 escaños de Ciudadanos y los 4 de Vox. Con todo la suma de estos tres partidos supera la mayoría absoluta en el Consistorio y alcanza los 30 concejales. Mas Madrid, la marca de Manuela Carmena, solo obtendrá 27 respaldos, pese a haber ganado las elecciones con 19 concejales.

ERC y Barcelona en Comú han empatado a 10 escaños en Barcelona. No obstante, ERC ha sacado unos 5.000 votos más, lo que presumiblemente hará a Ernest Maragall el nuevo alcalde y el primero de ERC en la historia de la ciudad. Para revalidar el gobierno, Colau necesitaría una alianza de fuerzas poco común: contar con los 8 parlamentarios del PSC y o bien los 6 de la candidatura de Ciudadanos que lidera Manuel Valls o los 5 de Junts per Catalunya, el partido de Carles Puigdemont. La propia alcaldesa saliente ya ha afirmado que buscará un pacto con la izquierda, aludiendo a ERC y PSC.

Joan Ribó será el alcalde de Valencia otros cuatro años más en la tercera ciudada española, el mayor de los ayuntamientos del cambio que se mantiene en pie tras 2019. El líder de Compromís, lejos de erosionarse por el poder, ha obtenido 10 escaños en las elecciones de este domingo, uno más que en 2015. La formación de izquierdas ha ganado las elecciones, superando al PP,  y podrá gobernar gracias a los siete ediles del PSOE, que también sube un concejal. Ello permite a la izquierda compensar la pérdida de los tres ediles de En Comú. En la derecha, el PP pierde dos escaños que pasan a Vox y Ciudadanos se mantiene.

Juan Espadas podrá gobernar con mayor comodidad que hace cuatro años, al pasar los socialistas de 11 a 13 concejalías y superar así al Partido Popular como fuerza más votada, con el 39% de las papeletas. Adelante Andalucía gana un escaño y se queda con cuatro, convirtiéndose en tercera fuerza por delante de Ciudadanos, mientras que Izquierda Unida pierde los dos que tenía. En la derecha el PP pierde cuatro de sus 12 concelajes y 10 puntos de porcentaje de votación; Ciudadanos suma uno hasta cuatro y Vox consigue dos, con el 7,95% de los votos.

Zaragoza cambiará su alcalde en los próximos días. Cuatro años después, la izquierda de Zaragoza en Comú (hoy ZGZ), liderada por Pedro Santisteve, abandonará el poder. Aunque el PSOE ha ganado las elecciones, la suma de los partidos de izquierdas (sus escaños unidos a los de Podemos y ZGZ pesar de haber ganado las elecciones el PSOE, la suma de diputados de los socialistas, Podemos y ZGZ (la formación del actual alcalde), la izquierda no suma fuerzas suficientes para gobernar.

Sin embargo, las formaciones de derecha, PP, Ciudadanos y Vox logran la mayoría necesaria para estar en el poder: 16 ediles. Puesto que el PP ha sido el partido más votado de los tres, con ocho representantes, el futuro alcalde será probablemente Jorge Azcón.

Francisco Manuel de la Torre Prados revalidará cuatro años más su cargo al frente de la alcaldía de Málaga que ejerce desde el año 2000. Ha conseguido ganar las elecciones por un estrecho margen, con 14 concejales frente a los 12 del PSOE. Los populares, de hecho, ganan un concejal sobre 2015 y mejora en tres puntos su porcentaje. El PSOE también sube, de nueve a 12 escaños, y durante parte de la noche electoral amenazó con retener la ciudad a Francisco de la Torre. Adelante Andalucía y Ciudadanos pierden un concejal cada uno para tener tres y dos, respectivamente e IU desaparece del mapa con sus dos representantes.

El PP mantiene su fortaleza en el ayuntamiento de Murcia. La de los populares sigue siendo la lista más votada, al lograr el 34,94% de los votos, y 11 concejales, solo uno menos que en 2015, un castigo muy reducido comparado con el de otros municipios españoles. El actual alcalde del PP, José Francisco Ballesta, tiene por tanto relativamente fácil mantenerse como edil con el apoyo de Ciudadanos, que ha logrado 4 concejales, y también de Vox, con 3, aunque no los necesitaría. El PSOE crece respecto a 2015 pero no lo suficiente para superar al PP. Los socialistas siguen siendo la segunda fuerza más votada con nueve concejales (tres más que en 2015), mientras que Vox supera a Podemos, que logra solo 2 concejales

El PSOE ha sido la fuerza más votada en el ayuntamiento de Palma de Mallorca con un 26,46% de los votos y nueve concejales, subiendo tres sobre 2015. De esta forma, José Hila podría conseguir la alcaldía en el caso de tener el apoyo de Podemos (tres ediles y 10,72% de las papeletas) y Més Per Mallorca (tres asientos y 10,49%) ya que superaría los 15 escaños necesarios para la mayoría absoluta. El Partido Popular ha conseguido seis concejales con el 18,58% de los votos y Vox y Ciudadanos han empatado a cuatro con un 13,11% y 12,35% de los votos totales.

En los anteriores comicios, Antoni Noguera, el candidato de Més Per Mallorca, se hizo con la alcaldía a pesar de contar con cinco escaños gracias al apoyo de los 5 concejales de la marca municipal de Podemos Som Palma y los 6 ediles que obtuvo entonces el PSOE. PP y Ciudadanos sacaron 9 y 4 asientos respectivamente.  

El Partido Socialista ha ganado con 11 concejales y un 31,74% de los votos. Augusto Hidalgo repetirá como alcalde gracias al pacto con Podemos y Nueva Canarias, formaciones que han sacado 3 escaños cada una al obtener el 10,38% y el 9,51% de los votos. El PP queda en segundo lugar con 7 ediles y el 22,23% de las papeletas mientras que Ciudadanos y CC obtienen 3 y 2 asientos respectivamente. En los anteriores comicios, el PSOE gobernó gracias al apoyo de Podemos y Nueva Canarias.

En Bilbao, el candidato del PNV, Juan Mari Aburto, ha conseguido 14 concejales al lograr más del 40% de los votos, quedándose sólo a un concejal de la mayoría absoluta. El Partido Socialista de Euskadi, con Alfonso Gil a la cabeza, ha sido la segunda candidatura más votada con 5 concejales. Jone Goirizelaia, la candidata de EH Bildu, ha obtenido 4 asientos.

Podemos y Partido Popular, con tres concejales ambos partidos, completan el pleno del ayuntamiento. En los anteriores comicios, el PNV contó con el 39, 435 de los votos y 13 representantes. Hubo un triple empate con 4 ediles entre EH Bildu, PSE y PP. Udalberri y Ganemos sacó 2 escaños.

En la capital alicantina el PP podrá mantener el control del ayuntamiento que consiguió el año pasado tras la imputación por prevaricación del anterior alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, y el cambio de voto de una concejal de Guanyar Alicante. En 2015 esta formación se unió a PSOE y Compromís para desalojar del poder a un PP acorralado por la Justicia. En estas elecciones el PP suma los 16 concejales que dan la mayoría absoluta sumando sus nueve (uno más) a los cinco de Ciudadanos y los dos de Vox. El PSOE se ha quedado también con nueve concejales, pero paga la caída de Podemos (de los seis de Guanyar a dos) y el concejal que pierde Compromís.

El Partido Popular recupera la alcaldía de Córdoba por la mínima tras las elecciones de ayer. De nuevo la subida del PSOE no es suficiente para compensar la pérdida de peso de sus socios de coalición. Los Populares siguen siendo la fuerza más votada, aunque pierden dos concejales para quedar con nueve frente a los ocho del PSOE, que sube uno. No obstante, Ciudadanos pasa de dos a cinco y Vox entra con dos, a costa de los que pierden IU y Podemos.

La capital castellanoleonesa, que cambió de manos en 2015 tras 20 años de mandato de Javier León de la Riva gracias a la alianza del PSOE con las confluencias cercanas a Podemos, ha dado cuatro años más a Óscar Puente. El PSOE se ha convertido en la fuerza más votada y ha pasado de ocho a 12 concejales, con el 35,6% de los votos frente al 30% del PP, que pierde otros tres escaños. Por su parte, la confluencia Toma la Palabra pierde solo un concejal hasta tres, justo para permitir la mayoría de izquierdas. Ciudadanos sube de dos a tres y Vox entra con uno.

El socialista Abel Caballero no deja mucho margen a la emoción. Ha conseguido un histórico triunfo sin parangón entre las grandes ciudades españolas, al menos en el pasado reciente: el 67% de los votos y 20 de 27 concejales, mejorando su ya espectacular resultado de 2015. Sube tres escaños que le arrebata al PP, que queda con cuatro. La Marea de Vigo pierde un concejal y el BNG desaparece del consistorio.

El desplome de Foro Asturias, permitirá a la izquierda recuperar la ciudad más poblada de Asturias, que había gobernado de forma ininterrumpida desde 1979 hasta 2011. La formación creada por Francisco Álvarez-Cascos pasa de ocho a tres concejales tras dos legislaturas en la alcaldía y el PSOE pasa de ser segunda fuerza política a más que duplicar al segundo partido. Consigue 11 concejales (siete en 2015) y le bastará el apoyo de Podemos (tres, la mitad de lo obtenido en 2015 por la confluencia) para conseguir mayoría. IU pasa de dos concejales a uno, el PP mantiene tres y Ciudadanos crece de uno a cuatro. Ana González será alcaldesa.

La segunda ciudad de Catalunya sigue siendo un fortín socialista, y la mayor ciudad de España que solamente ha conocido un partido en el gobierno desde 1979: el PSC. Los socialistas, liderados por Núria Martín, recuperan la mayoría absoluta perdida en 2011 con 14 concejales sobre 27 y el 43,35% de los votos. ERC sube para convertirse en segunda fuerza con cinco representantes y un 16% de los votos, mientras Ciudadanos pierde terreno (tal y como ha sucedido en el conjunto de Catalunya) aunque mantiene cuatro concejales, igual que Hospitalet en Comú. El PP salva su único representante por menos de 200 votos.

La lista del PSOE al ayuntamiento de Granada es la más votada en las elecciones municipales, la primera vez que esto ocurre desde 1987. Los socialistas, con el actual alcalde Francisco Cuenca a la cabeza, han logrado el 32,65% de los votos y 10 escaños. Sin embargo, la llave de para elegir nuevo alcalde la tendrá C’s, ya que la suma de PSOE y Adelante (3 escaños) queda a un puesto de la mayoría absoluta que se fija en 14 escaños y que sí lograría la suma de PP (7) y su candidato Sebastián Pérez, junto a Ciudadanos (4) y Vox (3)

De cohesionarse el bloque de la derecha, desplazarían al actual alcalde socialista de la alcaldía, que gobierna desde que en 2016 el anterior edil del PP, José Torres Hurtado, que había sido elegido con el apoyo inicial de Ciudadanos, presentara su dimisión al ser imputado en una trama de corrupción, conocida como operación Nazarí. Ciudadanos retiró entonces su apoyo al PP en el ayuntamiento, lo cual propició que Cuenca pudiese ser investido nuevo alcalde de la ciudad.

 Sin cambio en la alcaldía, que seguirá bajo el control de Gorka Urtaran, del PNV, aunque sí existe una vuelco significativo en los apoyos, puesto que el partido nacionalista se refuerza con siete concejales, desde los cinco de hace cinco años, y se convierte en la fuerza más votada en la ciudad desde 1995. Así podrá gobernar con cierta suficiencia con EH-Bildu (seis), pese a que ambas formaciones se quedan a un edil de la mayoría absoluta. El PSOE pasa de cuatro a seis concejales y Podemos logra tres. El PP se descalabra desde los nueve a los cinco concejales.

La izquierda seguirá gobernando A Coruña, pero con cambio de piloto. Inés Rey podrá ser alcaldesa con el apoyo de En Marea, invirtiendo las tornas sobre la actual legislatura, en la que Xulio Ferreiro estaba apoyado por los socialistas. Marea Atlántica cae de 10 concejales y 10 puntos de votos recibidos, mientras los socialistas pasan de seis a nueve y empatan con el PP como fuerza más votada. Aunque pierde un concejal, la coalición aún suma mayoría absoluta. El BNG, además, pasa de un concejal a dos y Ciudadanos entra con uno.

El actual alcalde del PSOE, Carlos González Serna, repetirá reforzado con el aluvión de nuevos votos que ha logrado, al pasar de ocho a doce concejales, con el previsible apoyo de Compromís, que baja de cuatro a dos. Con todo, lograría la mayoría con 14 ediles. Desaparecen dos partidos municipalistas: Ilicitanos, con dos respresentantes, y El Partido de Elche, que disponía de uno. El PP repite con nueve representantes, Cs pasa de tres a dos y Vox irrumpe con otros dos.

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