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Turismo

Exceltur reclama a los ayuntamientos restringir o vetar los pisos turísticos

Pone como ejemplo Palma de Mallorca, que solo lo permite en viviendas unifamiliares con excepciones

Gabriel Escarrer, presidente de Exceltur y también consejero delegado de Meliá.
Gabriel Escarrer, presidente de Exceltur y también consejero delegado de Meliá.PABLO MONGE

Tolerancia cero contra las viviendas turísticas. El lobby Exceltur, que representa a 28 de las mayores empresas de la industria turística en España, cargó contra el “descontrol” de los pisos de alquiler para turistas y reclamó a las comunidades autónomas, a dos meses para las elecciones regionales, que legislen y cedan la capacidad a los ayuntamientos (hasta ahora solo lo hacen Baleares y Canarias) para que puedan regular ese problema a través de sus competencias urbanísticas. “La magnitud del problema es nacional y no se está abordando con contundencia”, recalcó Gabriel Escarrer, presidente de Exceltur y también consejero delegado de Meliá.

Y puso como ejemplo las políticas del ayuntamiento de Palma de Mallorca, que fue pionero al ser el primer consistorio que estableció en 2018 un veto para las viviendas turísticas y que incluso fue más allá al prohibir los alquileres en viviendas plurifamiliares. El ayuntamiento, gobernado por una coalición formada por PSOE, Mes y Podem, optó por permitir tan solo el arrendamiento a viajeros en las viviendas unifamiliares, con la excepción de aquellas que estuvieran situados en suelo rústico protegido, en el entorno del aeropuerto y en áreas de uso no residencial como los polígonos industriales.

Otro ejemplo que utilizó Escarrer fue el de San Sebastián, gobernado por el PNV, donde se han limitado también los alquileres en primeras plantas y pisos bajos para evitar los posibles problemas de ruido que estos alquileres ocasionan a los vecinos. Aunque no se citó directamente, otro de los ayuntamientos que ha legislado en esta materia ha sido el de Madrid, dirigido por Manuela Carmena (Ahora Madrid), que fijó en junio de 2018 una regulación muy restrictiva. En concreto solo permitirá alquilar pisos para turistas durante más de 90 días al año si tienen una salida independiente a la calle, algo que no cumple el 85% actual de la oferta.

Escarrer también citó durante la presentación algunos de los efectos que el desmadre de los pisos turísticos ha ocasionado como la dificultad para encontrar alquileres en algunos destinos de Baleares, lo que ha expulsado a los vecinos de los cascos históricos y ha frenado a los trabajadores que han encontrado un empleo. “Tenemos dificultad para atraer talento porque no se encuentra vivienda asequible. Esos problemas se están produciendo en Ibiza o en Menorca y también nos está afectando a Meliá, ya que hemos tenido que volver a alojar a los empleados en los hoteles, ante la dificultad de que encuentren casa en el municipio donde trabajan o por la carestía de las casas”.

El presidente de Exceltur también citó como un efecto no deseado la conversión de los centros históricos de las grandes ciudades en grandes “parques temáticos” con una oferta y servicios dirigidos en exclusiva al turista.

En la presentación del informe Monitur 2018, en el que se mide la competitividad de los grandes destinos españoles, el vicepresidente ejecutivo de Exceltur, José Luis Zoreda, también cargó contra las tasas turísticas, como la de Cataluña o Baleares, o las subidas de impuestos de Aena. “La subida de tasas aéreas no se justifica. Aena no puede multiplicar dividendos a costa de subir tasas, que proceden del 90% del sector turístico. No favorece la expansión y la reposición del sector cuando los aires que impulsan la economía son distintos. Al mismo tiempo, en Bruselas se están considerando nuevos impuestos a las aerolíneas. Hay una tentación generalizada a castigar al sector porque va bien y lo aguanta todo”. En esa línea, Escarrer recalcó que las tasas “restan competitividad y márgenes a las empresas” y al mismo tiempo generan “inseguridad jurídica” ante la discrecionalidad de esas medidas.

Los cambios aprobados por decreto

1 de marzo. Fue la fecha elegida por el Ejecutivo para aprobar medidas para cambiar la legislación en materia de alquileres. En lo que se refiere a pisos turísticos hasta esa fecha los vecinos tenían capacidad de vetar un domicilio particular que fuera explotado como tal , siempre que lo hicieran por unanimidad.

Mayoría cualificada. Con el nuevo decreto se le otorga una mayor capacidad de veto a las comunidades de vecinos, ya que se precisa menos consenso para prohibir que haya pisos turísticos. Frente a la unanimidad se pasa a una mayoría cualificada que representa tres quintas partes de los propietarios.

Gastos. También fijó que los vecinos podrán cobrar al apartamento o piso que esté destinado al uso turístico hasta el 20% por ciento de los gastos anuales de la comunidad, además de la cuota mensual.

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