Análisis a fondo del Huawei P9
En el Mobile World Congress 2016 en Barcelona llegaron las primeras apuestas por la gama alta de esta nueva generación de teléfonos inteligentes, pero no todos los fabricantes lanzaron allí sus nuevos dispositivos. Huawei es una de las marcas que ha hecho esperar al mercado algo más, y hace apenas algunos días en un evento propio mostraban el nuevo Huawei P9 como alternativa a los Samsung Galaxy S7, los iPhone 6s y el LG G5 entre algunos otros.
Una fuerte apuesta por la cámara en el Huawei P9
Con la firma de Leica, el Huawei P9 tiene una de las mejores cartas de presentación, puesto que la firma ha colaborado en el desarrollo de esta cámara principal que destaca entre la competencia por la inclusión de un doble módulo, con ambos sensores de 12 megapíxeles y con una apertura f/2.2 que, eso sí, queda bastante distante del f/1.7 del Samsung Galaxy S7 y es algo que se nota especialmente en las tomas con poca luz. No obstante, la cámara tiene un desempeño excelente, y por su configuración de dos sensores permite el uso de filtros creativos interesantes, como el 'efecto Bokeh' de aspecto profesional.
En cualquier caso, si algo tiene de destacable este terminal, más allá de que su potencia con el Kirin 955 de ocho núcleos está a la altura de los equipos más punteros, es la autonomía. Con sus 3.000 mAh de batería, y una configuración de hardware muy eficiente gracias a la pantalla Full HD de 1920 x 1080 píxeles, el equipo puede estar activo durante dos días sin apenas problemas, lo que demuestra que en estos términos está algo por encima de sus rivales más directos.
Ahora bien, hay algunos puntos que no han terminado de convencer, y entre todos ellos quizá el más grave es la propia interfaz de usuario EMUI que Huawei instala sobre Android 6.0 Marshmallow. Tampoco es demasiado problema cuando, fácilmente, podemos instalar un 'launcher' para hacerlo más cercano a Android Stock, pero lo que no va a resolver son carencias como la grabación de vídeo en 4K, la pantalla que no es sensible a la presión o la falta de una pantalla QHD 2560 x 1440 píxeles como el Galaxy S7 o el LG G5.
