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Tres de las patentes más importantes han expirado o lo harán en 2017

Cambio de escenario en la artritis reumatoide

Esta patología afecta a más de 200.000 personas en España “En los próximos años veremos nuevas alternativas de tratamiento”, dicen desde MSD

Thinkstock
Manuel G. Pascual

La Sociedad Española de Reumatología calcula que la artritis reumatoide afecta a unas 200.000 personas, si bien su número crece a un ritmo de 20.000 casos detectados anualmente. Los síntomas son conocidos: inflamación persistente de las articulaciones, generalmente las de las manos y los pies. Producen deformidades y, si no se detiene su avance, pueden llegar a producir incapacidad funcional en las articulaciones afectadas. Su incidencia es mayor en mujeres que en hombres (la proporción es de tres a uno), y el grupo de edad más frecuente es el comprendido entre los 30 y los 50 años).

Hace tiempo que la industria farmacéutica trabaja en el desarrollo de terapias biológicas para combatir esta enfermedad, cuya incidencia en la población ha ido a más en la medida en que se ha elevado también la esperanza de vida.

No se trata de un mercado menor. Los nueve fármacos biológicos disponibles en España facturaron entre mayo de 2014 y abril de 2015 más de 213 millones de euros, según datos facilitados a CincoDías por la consultora especializada IMS Health. El superventas, con 65 millones de euros acumulados durante el mencionado periodo, es Etanercept. Desarrollado por Pfizer, este fármaco es un anticuerpo monoclonal inhibidor de la proteína TNF-alfa, responsable de la necrosis tumoral. Está indicado para artritis reumatoide (también su versión juvenil) moderada o grave. Se aplica cuando la respuesta a fármacos antirreumáticos, como metotrexato, no ha sido suficiente.

Fármacos biológicos para artritis reumatoide

La patente de esta terapia expira en 2017, el mismo año en que lo hará la de Adalimumab, el segundo fármaco más vendido para esta indicación. Producido por los laboratorios Abbvie, en este caso también se puede aplicar entre pacientes con la enfermedad de Crohn y de espondilitis.

Los laboratorios Janssen, del grupo Johnson & Johnson, son los responsables de Infliximab, distribuido en España por MSD. Este principio activo ha perdido la patente este mismo año, abriendo así la puerta a otros laboratorios, como Kern Pharma, para que lo produzcan y comercialicen.

“MSD está a favor de la libre competencia en el mercado de las terapias biológicas, siempre anteponiendo, por encima de todo, la seguridad del paciente”, apunta la compañía farmacéutica. Su estrategia, tras haber perdido la exclusividad de la molécula, pasa por “continuar innovando más allá de los fármacos y, por ello, desarrollar servicios diferenciales para pacientes y profesionales sanitarios que permitan una gestión eficiente de la patología, colaborando en la mejora de los resultados en salud y en la optimización de recursos”, apunta un portavoz de la firma.

Perspectivas de futuro

Octubre, el mes de esta enfermedad

Bajo el lema Tu bienestAR, ¡sí es posible!, la Coordinadora Nacional de Artritis ha puesto en marcha la decimoprimera edición de la campaña Octubre, mes de la artritis y la espondiloartritis. El objetivo: hacer ver a las personas que padecen estas enfermedades que, siguiendo una serie de pautas, pueden disfrutar de una buena calidad de vida.

Durante todo el mes se celebran conferencias en varias ciudades españolas. También se ponen en lugares transitados mesas informativas. Más información en Conartritis.org.

La misma compañía tiene también en su cartera Golimumab, indicado para el tratamiento de artritis reumatoide y otras enfermedades reumáticas, que no necesariamente deberán haber sido tratados anteriormente con metrotexato. “MSD sigue invirtiendo en la búsqueda continua de oportunidades, especialmente en el campo de la inmunología, para descubrir fármacos innovadores que tengan mecanismos de acción distintos a los ya comercializados, que aporten soluciones en salud a las necesidades todavía sin cubrir de los pacientes, en este caso artritis reumatoide”, explican desde la firma.

En el proceso de inflamación de la artritis reumatoide intervienen muchas moléculas. Por tanto, explican desde un importante productor, los investigadores tienen ante sí varios frentes sobre los que trabajar.

“El proceso de desarrollo de estos medicamentos es complejo y sobre todo largo”, aseguran en MSD, “pero en los próximos años veremos nuevas alternativas de tratamiento para los pacientes que sufren estas patologías”.

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Sobre la firma

Manuel G. Pascual
Es redactor de la sección de Tecnología. Sigue la actualidad de las grandes tecnológicas y las repercusiones de la era digital en la privacidad de los ciudadanos. Antes de incorporarse a EL PAÍS trabajó en Cinco Días y Retina.

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