Sin grandes cambios en la tesis de inversión en 2015, simplemente todo está más barato
En enero escribí varios artículos haciendo referencia a las perspectivas de los mercados y de la renta variable europea en particular.
La positiva tesis de inversión en bolsa europea estaba basada en 5 puntos:
- Tipos en 0% rebajarán el coste financiero de empresas y familias durante años
- QE del BCE apoyará los balances de los bancos, reducirá el coste financiero de los estados y fomentará el crecimiento del crédito en Europa
- La debilidad del euro apoyará las exportaciones y apuntalará el crecimiento de los beneficios de las empresas europeas que todavía están muy deprimidos en términos históricos.
- La caída de las materias primas y especialmente del petróleo actuarán como una bajada de impuestos para el consumidor europeo con implicaciones muy positivas tanto a nivel empresarial como macroeconómico
- Los 4 puntos anteriores, facilitarán el incremento del poder adquisitivo de los europeos, fomentará el consumo, apoyará la inversión y creará nuevos empleos, que redundará en un crecimiento del PIB de Europa prácticamente garantizado.
El mercado tuvo un comportamiento meteórico hasta mayo, con subidas superiores al 20% en la renta variable europea y bajadas de las tires (subidas de los precios de los bonos) hasta niveles nunca antes vistos (llegamos a tener las letras del tesoro español con rentabilidades negativas).
A partir de junio empezaron a florecer los riesgos, que por otra parte eran bien sabidos por el mercado, pero la volatilidad de los mercados, es la que es, y no va a cambiar. A la posible salida del euro de Grecia, se unió la esperada subida de tipos en EEUU, la desaceleración acusada del crecimiento en China y su implicación en el resto de economías emergentes y desarrolladas. Si a estos miedos/riesgos, le unimos el escándalo de Volkswagen, nos encontramos en septiembre en los mismos niveles que hacía 12 meses, es decir, todas las buenas perspectivas en la inversión en bolsa europea se esfumaron en 2 meses.
Pero la realidad en octubre es que los 5 puntos en los que se basa la positiva tesis de inversión en renta variable europea, siguen vigentes y no se han descarrilado. Cierto es que el riesgo de una desaceleración abrupta del crecimiento de los países emergentes, añaden mayor incertidumbre si cabe al comportamiento de los mercados, pero aún teniéndolo en cuenta, no veo que vaya a lastrar la tesis de inversión. Habrá empresas o sectores más afectados que otros por el comportamiento macroeconómico de las distintas áreas geográficas, pero el tono general para la inversión en renta variable e incluso en renta fija, sigue arrojando muchas más luces que sombras.
Javier Galán, Gestor de Renta Variable Europea de Renta 4 Gestora