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¿Cuánto puedo ganar o perder por mis bonos?

Cuando realizamos una inversión en un bono sea de gobierno o corporativo inconscientemente los primeros datos en los que nos fijamos es en la TIR ofrecida y en el plazo de vencimiento del mismo, y por tanto en la rentabilidad a vencimiento si no existe ningún evento de crédito. En este análisis dejamos de lado las variaciones en precios y por tanto en rentabilidades durante la vida de nuestra inversión.

Ahora bien, al igual de lo que sucede con la acción de una compañía, la cotización del precio del bono es susceptible de variaciones y un inversor puede deshacer su inversión en un determinado bono antes del vencimiento ya que en mercado pueden surgir alternativas más interesantes. Debido a ello la duración de un bono y su duración modificada toman una importancia capital.

En primer lugar tendremos que conocer que es eso que llamamos duración, concepto que es un paso adelante al término de “maturity”, que es el plazo de tiempo hasta el vencimiento, siendo la duración la longitud media de tiempo en la que un inversor espera obtener su dinero en una inversión en bonos, también la podríamos definir como la sensibilidad del precio del bono en relación a las variaciones de los tipos de interés.

El segundo concepto que trataremos hoy es el duración modificada que la podemos definir como la variación que se produce en el precio del bono con una variación de un uno por ciento del rendimiento. Es decir, si nosotros tenemos un bono a una TIR del 4% con una duración modificada de 8, si la TIR del bono pasa al 5%, el precio de nuestro bono caerá un 8%.

Hay que tener en cuenta que existen distintas variables que determinan la duración de un bono y por tanto su riesgo, como es el cupón (a mayor cupón menor duración), el plazo de vencimiento (a mayor vencimiento más duración), cupón corrido (el la parte del cupón todavía no pagado pero que se tiene derecho hasta la fecha en cuestión), el rendimiento hasta el vencimiento (a mayor rendimiento menor duración), que el bono se amortice parcialmente (reduce la duración del bono), amortización anticipada de la emisión (es la misma justificación que la anterior) y el paso del tiempo (a medida que pasa el tiempo se reduce su duración).

Ante bonos con la misma fecha de vencimiento y misma TIR aquellos que tengan un cupón más alto tendrán una duración menor ya que tardaremos menos tiempo en recuperar nuestra inversión, por tanto un bono cupón cero, que son bonos que no pagan cupones, tendrán una duración igual a la “maturity” del bono.

Por tanto a mayor duración de un bono más riesgo existe ante las variaciones en los tipos de interés, por tanto si esperamos subidas en los tipos de interés, deberíamos tener bonos con una duración más corta ya que perderán menos en precio que en los bonos con una duración mayor. Por el contrario si esperamos bajadas en los tipos de interés deberemos tener bonos con una duración mayor ya que son los que más ganaremos en precios por ese movimiento.

Para ver el impacto que tendríamos en distintos bonos, si por ejemplo tuviéramos un bono americano vencimiento 10 años que tiene una duración modificada de 9.083 y actualmente tiene una TIR del 1.784 si su TIR volviese a su nivel medio de los últimos 5 años (TIR=2.931) la diferencia en puntos básicos sería de 114.7 y por tanto su variación en precios sería aproximadamente de un –10.5%. Por tanto existe un riesgo evidente en precios de dichos bonos ante variaciones en su TIR.

Este mismo calculo lo podemos aplicar en los bonos de los distintos países, ante una normalización de las curvas. Por ejemplo la media de los últimos 5 años de la rentabilidad del bono alemán a 10 años es del 2.855% frente al 1.413% actual la diferencia es de 144.2 puntos básicos, siendo la duración modificada de dicho bono de 8.925 por tanto una vuelta a la media nos repercutiría negativamente en un –12.86% aproximadamente.

En los niveles actuales de tipos de los bonos a largo plazo deberíamos extremar la prudencia ya que existe un riesgo importante de minusvalías latentes, por lo tanto seriamos vendedores de bonos de más largo plazo y de países que ofrecen bajos niveles de rentabilidad como es el caso de Alemania, Reino Unido, EE.UU, Suiza,.... y no estaríamos en fondos de renta fija de duraciones largas.

Celso Otero

Gestor de Fondos en Renta 4 Banco

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