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Tribuna
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Temores de la gran banca

¿Se ha solucionado el problema de las entidades sitémicas? La Corporación Federal de Garantía de Depósitos de EE UU (FDIC por sus siglas en inglés) y el Banco de Inglaterra (BoE) parecen muy confiados, al declarar que están en condiciones de gestionar la caída de un banco sistémico sin causar pérdidas a los contribuyentes. El mercado da señales.

Pese a que la opinión pública puede pensar que los grandes banqueros serán rescatados en una crisis, los inversores en deuda bancaria de EE UU no quieren correr riesgos. De hecho, las mayores instituciones financieras del país están pagando más para financiar sus carteras de préstamos en el mercado de seguros contra impagos que empresas industriales. Y más que entidades más pequeñas.

Los seis principales bancos y agentes de bolsa, aquellos cuyos balances son superiores a 750.000 millones de dólares, pagaron recientemente unos 129 puntos básicos más por su deuda a cinco años sin asegurar. Además, pagaron más que la media de 15 bancos regionales.

A pesar de su tamaño y de que algunos de estos bancos fueron rescatados en 2008, los inversores creen que invertir en su deuda es arriesgado. Eso refuerza a los reguladores, que dicen que las nuevas normas les dan la autoridad de cerrar los bancos problemáticos.

El mercado bancario de depósitos puede reflejar las dudas persistentes. La FDIC muestra que desde la crisis, los bancos con más de 10.000 millones de dólares en activos pagan menos a los depositantes que los pequeños. Esto puede deberse a un mayor número de sucursales y cajeros automáticos, más gastos de márketing y una mayor variedad de productos que hacen que los ahorradores perciban a estas entidades como infalibles.

Hasta que un gobierno deje caer a un banco con cargo a sus bonistas y accionistas, el veredicto quedará pendiente en el destino de las entidades sistémicas. Es esperanzador, en cambio, ver a los inversores reconociendo la posibilidad.

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