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Los expertos creen que Popular, BMN, Ibercaja y Liberbank necesitarán ayudas

Los test de estrés a la banca dejan malheridos a los planes de fusión

Los test de estrés a la banca dejan malheridos a los planes de fusión
Los test de estrés a la banca dejan malheridos a los planes de fusión

Los resultados del test de estrés definitivos que la consultora Oliver Wyman ha llevado a cabo sobre la banca española, que han comenzado a comunicarse a las entidades esta semana y se harán públicos el próximo viernes, amenazan con dar al traste con la nueva ola de fusiones prevista. Los agujeros detectados en algunas de las entidades de menor tamaño están haciendo que otros mayores, con su propia carga, se replanteen su interés en absorberlas. La mala experiencia de Bankia, por otra parte, hace desaconsejable bendecir matrimonios entre firmas medianas que provoquen un gran incendio, de lo que eran unos pocos focos. Las estimaciones de Bank of America Merrill Lynch y J. P. Morgan coinciden en dar por salvados a Banco Santander, BBVA, CaixaBank, Bankinter y Kutxabank. Mientras Sabadell plantea dudas (una firma cree que no precisará nada y la otra que tendrá que reforzarse en 500 millones), los analistas de estos bancos de inversión coinciden en que todo el resto del sector necesitará capital adicional.

El caso más destacable es el de Banco Popular, que absorbió Pastor a pulmón apenas unos meses antes de que el Gobierno comenzara a elevar los saneamientos exigidos sobre el ladrillo. Pese a su plan de venta de activos, las estimaciones de Bank of America hablan de unas necesidades de 3.103 millones de euros para alcanzar el 6% de capital principal que Bruselas reclama ahora a toda la banca española. Fuentes de la entidad aseveran, sin embargo, que los analistas se han comprometido a revisar a la baja esta cifra tras detectar un fallo en los cálculos.

Las cifras de J. P. Morgan, por su parte, hablan de 3.295 millones. Ahorro Corporación, no obstante, las situaba en un máximo de algo más de 1.000 millones. Una horquilla, en todo caso, que dificultará el proceso de fusión con BMN que estudia la entidad presidida por Ángel Ron. La unión de cajas que lidera Caja Murcia requerirá por su parte unos 2.136 millones, según los analistas. Con una generación anual de unos 1.000 millones, es posible que Popular en solitario pueda sobrevivir con una suerte de rescate suave que implique recursos públicos de forma temporal, pero los más de 5.000 millones que harían falta al grupo resultante de la fusión Popular-BMN son palabras mayores.

Otra de las operaciones en vilo es el acuerdo de enlace entre Ibercaja, que ya se hizo con Caja3, y Liberbank. Las cajas medianas planearon un matrimonio de supervivencia que nació condicionado a los resultados de la prueba de estrés. No en vano, el refrendo de la unión se programó para después de los resultados con vista a comprobar primero el impacto de estos. Los expertos de Bank of America hablan de un agujero de 1.199 millones para Liberbank y de 1.229 millones para Ibercaja, sin incluir Caja3.

Otra operación que queda en el aire, pese a que se presentó en firme y con ayudas públicas tras arduos meses de negociación, es la absorción de Caja España-Duero por parte de Unicaja. La entidad malagueña se presenta como una de las más solventes de entre las cajas medianas, con unas necesidades de capital estimadas por Bank of America de 93 millones. Queda por ver, sin embargo, si su presidente, Braulio Medel, está dispuesto a asumir el sacrificio de cargar con las cajas castellanas. Los expertos de J. P. Morgan consideran que el nuevo grupo arrastraría unas necesidades de 2.772 millones.

Con todo, habrá que esperar al próximo viernes para conocer los resultados definitivos y el futuro de cada operación. Después de todo, el informe de Bank of America habla de unas necesidades globales de unos 51.500 millones, frente a los 62.000 que se esperan para el sector.

40.000 millones solo para las firmas nacionalizadas

El grueso de la factura de recapitalización de la banca, parte de la cual quedará cubierta con el rescate de hasta 100.000 millones que ha puesto sobre la mesa Bruselas, irá dirigido a las entidades ya intervenidas. Según los cálculos de Bank of America Merrill Lynch, Bankia necesitará unos 26.437 millones; Caixa Catalunya, unos 7.831 millones; Novagalicia, 6.439 millones, y Banco de Valencia, 3.077 millones. Los expertos de J. P. Morgan son algo más cautos en el caso de Bankia, para quien asumen necesidades de 20.097 millones, mientras que prevén 5.176 para Banco de Valencia, 7.129 para Catalunya Caixa y 8.116 para Novagalicia.

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