La gran subasta y el objetivo exigible
Hoy figura en el calendario como el día de la gran subasta. Mario Draghi pondrá a disposición de las entidades bancarias de la zona euro fondos ilimitados durante tres años al 1% para sanear el sistema. Son las mismas condiciones que la celebrada el 21 de diciembre, cuando la banca demandó 489.000 millones de euros. Pero según algunos expertos, en esta ocasión la cifra puede acercarse al billón, aunque el consenso se fija en torno a los 500.000 millones de nuevo, cifra a partir de la cual se considera que se empezará a notar la liquidez en la economía.
La estrategia de riego por inundación del presidente del BCE, establecida para evitar un batacazo, ha servido hasta ahora a la banca para cubrir vencimientos, comprar deuda soberana y frenar el hundimiento del crédito. A partir de hoy, debe abrir las compuertas de los préstamos, algo que empezará por los clientes más solventes. En otras palabras, Draghi ha cumplido, es hora de que las otras partes también lo hagan: los Gobiernos, con los ajustes presupuestarios y reformas necesarias, y la banca completando su saneamiento. Pero esto último solo servirá de verdad cuando esta ingente ayuda revierta en empresas y familias, en la economía real.
