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Elecciones 2011. Locales y autonómicas

Zapatero impone las primarias frente a un sector del PSOE crítico con la ejecutiva

El presidente del Gobierno y secretario general socialista quiso ayer aplacar el foco de discrepancia dentro del PSOE, liderado por Patxi López, que pide la celebración de un congreso extraordinario para renovar a la ejecutiva y las líneas programáticas. Zapatero mantiene que la prioridad son las elecciones internas para elegir al cabeza de cartel.

Zapatero no quiere saber nada de un congreso extraordinario para renovar la ejecutiva del PSOE y lanzar nuevas líneas de programa. El próximo está previsto para 2012 y en él se ha de elegir al nuevo secretario general y a la dirección del partido. Pero el lehendakari y secretario general del PSE-EE, Patxi López, capitalizó el martes toda la sensación de malestar que hay en el PSOE y solicitó la convocatoria ya de un congreso extraordinario.

Según López, con unas primarias no sería suficiente porque, dados los "malos resultados" del 22-M, es necesario "abordar un proceso de reflexión y debate que culmine en la aprobación de un nuevo programa". En los pasillos del Congreso de los Diputados, Zapatero dijo que mantenía su apuesta por la celebración de primarias y no de un congreso extraordinario. Añadió que telefoneó a Patxi López por la mañana y que ambos estaban de acuerdo en celebrar elecciones internas. "He llamado esta mañana con Patxi López, le he explicado cómo vamos a hacer las cosas y hemos estado completamente de acuerdo", comentó Rodríguez Zapatero.

Zapatero y el vicesecretario general, José Blanco, se reunirán el viernes con los secretarios regionales para escuchar sus propuestas. Un día después, el sábado, se celebrará un comité federal, máximo órgano entre congresos, que lanzará el calendario de las primarias. A pesar de que López abogó en público por un cónclave extraordinario, Zapatero aseveró ayer que tras la conversación telefónica López estaba de acuerdo en celebrar primarias.

No obstante, el PSE-EE difundió ayer un comunicado en el se decía: "Pensamos que la mejor solución es definir primero el qué y el para qué, es decir, qué ofrecemos a los ciudadanos, y después el quién. Y seguimos pensando que el mejor camino para conseguir esto es un congreso".

Esta petición de un congreso extraordinario se interpreta como un órdago al propio Zapatero y a la dirección del PSOE. Así lo entiende el diputado socialista Fernando Moraleda, ex secretario de Estado de Comunicación, para quien un cónclave federal supondría una "moción de censura" contra José Luis Rodríguez Zapatero como secretario general que él no comparte y que no ve conveniente.

Reunión del viernes

Durante la reunión con los secretarios regionales del viernes, Zapatero y Blanco tratarán de neutralizar la corriente dentro del partido que pretende forzar la celebración de un congreso extraordinario. La pretensión de la dirección socialista era no dar la sensación de división, pero los malos resultados han sacudido al partido.

El secretario general del PSOE de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, rechazó ayer la existencia de una "mano negra" para desbancar a Zapatero y reiteró que tan "democrático" es un congreso como unas primarias para elegir al sucesor de Rodríguez Zapatero como candidato socialista a las próximas elecciones generales.

Posiciones dispares dentro del partido

Los resultados del domingo han generado división en el PSOE sobre qué camino tomar para recuperar cuanto antes el favor de los ciudadanos. Las declaraciones públicas de dirigentes y diputados desde el lunes deja ver varias corrientes de opinión.A favor de un congreso. Patxi López, líder de los socialistas vascos, ha pedido la celebración de un congreso extraordinario. Esta posición fue aprobada por unanimidad por la ejecutiva del PSE-EE. Guillermo Fernández Vara y el diputado socialista Rafael Simancas se han mostrado también partidarios de que hay que ir más allá de la celebración de unas primarias. El ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, dijo ayer que la propuesta del lehendakari sobre el congreso tiene "buen fundamento".A favor de primarias. Zapatero es el principal defensor y ayer mismo volvió a decirlo en los pasillos del Congreso de los Diputados. Manifestó que es "lo saludable y lo conveniente". La ministra Trinidad Jiménez, el exministro Juan Fernando López Aguilar y el diputado Álvaro Cuesta se han mostrado partidarios también de las elecciones internas.A favor de un candidato. José Antonio Alonso, portavoz socialista, es uno de los destacados partidarios de que no haya primarias, pero sí cree que sería "sensato" un candidato de consenso para suceder a Zapatero. En esta corriente figuran Juan Carlos Rodríguez Ibarra, Diego López Garrido y Juan Barranco.

La cifra

2012 es el año en que está previsto el congreso ordinario del PSOE para elegir secretario general y nueva ejecutiva. Patxi López pide adelantarlo.

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