Boda real: hagan juego
Ya está "en juego" la boda real, que reparte mucho dinero entre los apostantes. Lo que sí parece claro es que la novia no plantará al príncipe Guillermo, opción que se paga 101 contra uno. Aunque, hasta que el "árbitro" no pite el final...
La boda ya está en marcha y algunas dudas empiezan a esclarecerse, lo que influye de forma directa en las casas de apuestas, que van reduciendo poco a poco las categorías sobre las que apostar. Si hace unos días Ladbrokes disponía de hasta 17 categorías sobre las que especular, ya sólo hay disponible una que contiene hasta 15 variables.
El príncipe Guillermo ya ha llegado a la abadía de Westminster junto a su hermano Harry, sobre quien se fija una de las apuestas que mejor se pagan: 101 libras contra una a que se ha olvidado el anillo. El arzobispo de Canterbury, que oficiará la ceremonia, es el otro protagonista. Hasta cuatro apuestas especulan con que cometa algún tipo de error: por ejemplo, que se le caiga la Biblia durante la ceremonia es recompensado con 34 libras por cada una apostada.
Que el padre de la novia llore mientras la acompaña al altar es la apuesta con menos recompensa: tres libras a uno. La que sí parece que no va a repartir dinero es la que especula con que Kate Middleton deje plantado al futuro heredero a la corona británica, aunque aún se paga 101 contra uno. Los más valientes pueden jugar con esta opción. Hasta que no pronuncien el "sí, quiero"... todo es posible. Lo que sí se ha esclarecido es una de las grandes incógnitas del día: el sombrero de la reina. Finalmente, es amarillo.
Una semana de especulaciones
Durante la semana, las casas habían puesto a disposición de los jugadores múltiples opciones para vivir la boda real con más interés. La página web Bodog.com pagaba 26 libras por cada una apostada a que el anillo de bodas será extraviado, a que el Príncipe Carlos sería enfocado llorando durante la ceremonia o 13 libras a una a que Kate Middleton llevará un bikini amarillo en la primera foto de la luna de miel. El color del sombrero de la Reina o la audiencia televisiva de la ceremonia también son objeto de los apostantes.
Pero las especulaciones van más allá de la propia ceremonia. El año de nacimiento del primer hijo y su sexo también son discutidos. En el primer caso, no hay demasiadas dudas a que será en 2012, ya que su cuota es de 1,72, mientras que en el segundo se pagan dos libras tanto a que es niño como a que es niña.
La boda del Príncipe Guillermo con Kate Middleton es el acontecimiento social más importante en años en las islas británicas, y las casas de apuestas no van a desaprovechar la ocasión para hacer un buen negocio.
