La CEOE teme verse perjudicada por los problemas empresariales de su líder

La cúpula patronal conocía los problemas que atravesaba la aseguradora de su presidente, Mercurio, porque éste se lo advirtió. Aunque su cierre no les pilló de improviso, hay quienes temen que los problemas empresariales de su líder perjudiquen la imagen de la CEOE.

No nos pilló por sorpresa. Conocíamos los problemas económicos que atravesaba Mercurio", admiten en la CEOE. Muchos de sus miembros se veían venir el nuevo varapalo empresarial que ha sufrido su presidente, Gerardo Díaz Ferrán, porque él mismo se lo había advertido. La aseguradora Mercurio, que presidía junto a su socio Gonzalo Pascual, fue intervenida el lunes por el Ministerio de Economía ante "la falta de liquidez" que podría impedirle "cumplir sus compromisos de pago en las próximas semanas".

Este acontecimiento no aparece en el orden del día que reúne esta mañana a la Junta Directiva de la CEOE. Desde la patronal no descartan, sin embargo, que Díaz Ferrán dé explicaciones sobre el tema, como ya hiciera tras la quiebra de su aerolínea, Air Comet. "Esta vez tendrá más complicado el aplauso unánime", matizan algunos de los asociados consultados, en referencia a las ratificaciones a las que se sometió el dueño de Marsans. La mayoría descarta, no obstante, que alguien pida la dimisión del presidente pese a que se le acumulan los problemas empresariales y a que, en medio de la negociación de la reforma laboral, el futuro de parte de sus negocios esté en manos del Ministerio de Economía.

"Deteriora la imagen de la patronal", se atreven a confesar sottovoce algunos miembros de la CEOE. Una crítica velada que comienza a extenderse, pero que sólo el presidente de Cepyme, Jesús Bárcenas, enfrentado directamente con Díaz Ferrán, se ha atrevido a exponer públicamente. En el otro extremo, un portavoz oficial de la CEOE defiende el carácter democrático de las decisiones que toma la patronal y descarta que Díaz Ferrán vea hipotecada su labor por la situación que atraviesa. De hecho, no falta quien esgrime los desencuentros que el líder patronal ha mantenido con Ejecutivo y sindicatos como muestra de su independencia.

Muestras de apoyo

El apoyo más férreo de la clase empresarial le llegó de Arturo Fernández, líder de la patronal madrileña (CEIM) y cuñado de Díaz Ferrán. "Han corrido ríos de tinta sobre el tema, y esta casa mantiene su posición inalterable de que siga siendo el presidente de los empresarios españoles", aseveró. Una opinión que fue suscrita por Confemetal.

En cuanto a su validez como interlocutor de cara al diálogo social, tanto PSOE como PP manifestaron ayer su "respeto" por la decisión que tome la patronal. Pese a ello, la vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, declaró que aunque Díaz Ferrán esté legitimado, queda en duda su "representatividad" como empresario. Desde UGT y CC OO, a su vez, manifestaron su deseo de que los problemas empresariales del patrón de patronos no interfieran en el avance del diálogo social tripartito que mantienen actualmente.

Barceló: "Yo tendría que irme"

El presidente del Instituto de Empresa Familiar (IEF), Simón Pedro Barceló, esquivó ayer como pudo las preguntas sobre Gerardo Díaz Ferrán y el hecho de que el grupo empresarial del presidente de la CEOE atraviese serias dificultades económicas. Barceló explicó que en el caso del IEF esto no es posible, ya que los estatutos de la entidad impiden ser asociado y propietario de una empresa en concurso de acreedores.Barceló no quiso comentar la posición de Díaz Ferrán, que ha visto cerrada su aerolínea Air Comet y la intervención de su aseguradora, Mercurio por parte del Gobierno, ya que el IEF no pertenece a la CEOE, informa Borja Guerrero. "Yo tendría que irme si entrara en concurso", matizó Barceló sobre su propia posición al frente del IEF.Por otra parte, Barceló se mostró contrario a abaratar el despido argumentando que "no hubiera generado el mantenimiento del empleo". Sí se mostró a favor, sin embargo, de rebajar el coste de las cotizaciones sociales que los empresarios pagan a la Seguridad Social.