A la salida de su reunión con los ministros de Industria de la Unión Europea (UE), el directivo de la multinacional estadounidense ha asegurado que la comunicación se producirá a finales de diciembre o principios de enero.
Reilly no ha querido dar detalles sobre el destino de las plantas de producción ni sobre recortes de personal, y se ha limitado a declarar a los medios de comunicación: "No podemos continuar con más capacidad de trabajo de la necesaria".