Los consejos de Unicaja y Cajasur dan luz verde al plan estratégico de su fusión

Los consejos de administración de Unicaja y Cajasur aprobaron ayer un plan estratégico para su fusión, el mismo día en que vencía el ultimátum del Banco de España para que llegaran a un acuerdo. 24 horas después de que las cúpulas directivas de ambas entidades terminaran de limar sus diferencias, el máximo órgano de gobierno de la caja cordobesa daba su visto bueno al plan de reestructuración elaborado por la firma Boston Consulting Group (BCG), que prevé el recorte de la plantilla en 1.224 trabajadores.

El presidente de Cajasur, Santiago Gómez Sierra, ha estado presionado por la amenaza del Banco de España de que intervendría la entidad financiera si no concretaba sus planes de fusión con Unicaja.

De acuerdo con fuentes cercanas al consejo de la caja cordobesa, también ha sido clave el compromiso del presidente de Unicaja, Braulio Medel, de que el cierre de oficinas se hará tras realizarse un estudio de viabilidad económica de cada sucursal, y no asignando una cuota fija para cada caja.

En el comunicado conjunto distribuido ayer, Unicaja y Cajasur asumen íntegramente el plan de reestructuración elaborado por BCG "como cuerpo básico de referencia en el proyecto de fusión", y se comprometen a cerrar un acuerdo laboral que "obligue fehacientemente a la consecución de las sinergias de costes de personal recogidas en el plan".

Sin embargo, Medel también ha garantizado a Cajasur que las cifras del estudio tan sólo son un punto de partida en la negociación con la plantilla. Las previsiones de BCG eran que Cajasur asumiera el 80% del total de los despidos.

El sindicato mayoritario en Cajasur, Aspromonte, valoró ayer de forma positiva el principio de acuerdo sobre el plan estratégico de la fusión pues "se ha evitado algo que nadie quería", en referencia a la intervención de Cajasur por el Banco de España, pero, "por coherencia", el sindicato optó por votar en contra de dicho plan en el consejo.

El nuevo grupo, en el que también participará Caja Jaén, pedirá cerca de 1.000 millones de fondos públicos para acometer su reestructuración.