En el segundo trimestre se había registrado ya un incremento del PIB del 0,4%. Sin embargo, en la comparación interanual se percibe todavía con claridad el impacto de la crisis económica y financiera internacional sobre la coyuntura alemana. En comparación con el tercer trimestre de 2008, el PIB alemán se contrajo en un 4,7%. Esa caída es menor que la registrada en el segundo trimestre cuando, con respecto al mismo periodo de 2008, el PIB había bajado un 7%.
La recuperación incipiente en el tercer trimestre ha sido impulsada por el crecimiento de las inversiones, que en comparación con el trimestre precedente aumentaron un 1,5%.
Las inversiones en bienes de equipo registraron un crecimiento del 0,8%, incremento que adquiere una mayor dimensión si se tiene en cuenta que en los primeros tres meses del año todavía se había registrado una caída del 18,5% con respecto al último trimestre de 2008. Aunque las exportaciones crecieron en el citado periodo en un 4,9% y las importaciones lo hicieron en un 6,5%. El consumo privado, en cambio, descendió en un 0,9%, mientras que el estatal aumentó en un 0,1%.