"Nuestro objetivo en esta materia ha sido siempre muy claro: inmigración legal, ordenada, integrada, con derechos y obligaciones de ciudadanía, y para conseguirlo en esta ley hemos apostado por el consenso, el rigor y la eficacia", dijo la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
De la Vega describió el texto como equilibrado y garantista, y afirmó que el Gobierno quería pasar de una Ley de Extranjería a una Ley de Inmigración.
El Consejo aprobó el texto tras su paso por organismos como el Consejo de Estado, el Foro de la Inmigración y el Consejo General del Poder Judicial.
Ampliación del periodo de internamiento
Entre las novedades de la reforma figuran la ampliación a 60 días del período de internamiento en situación irregular, frente a los 40 de la actualidad.
En lo que respecta a la reagrupación familiar, los ascendientes de los inmigrantes deberán ser mayores de 65 años, aunque la nueva formulación del texto prevé la entrada de las parejas de hecho.