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Coyuntura

Solbes admite que el crecimiento puede estar por debajo del 3% a final de 2008

El crecimiento económico se situará a finales del año que viene por debajo del 3%, aunque la media en el ejercicio sea del 3,3%, según admitió ayer el vicepresidente económico, Pedro Solbes, en el Senado, donde reconoció la dificultad que encuentra para realizar previsiones a un año vista teniendo en cuenta las incertidumbres adosadas a la actual crisis financiera.

El vicepresidente suscribió ayer en la Cámara Alta un razonamiento similar al expresado hace días por el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez. Si la crisis originada por las hipotecas basura en Estados Unidos se prolonga, el impacto sobre la economía será mayor. Y a día de hoy, nadie conoce todavía ni la profundidad ni la duración de la tormenta. De ahí que sea pronto todavía para conocer cómo va a evolucionar la economía estadounidense y, por extensión, la europea y la española. Solbes mantuvo su apuesta por un crecimiento medio del 3,3% para 2008, aunque admitió que posiblemente el año acabe por debajo del 3%, una cifra que, en su opinión, seguiría siendo 'magnífica'.

Los cálculos oficiales apuntan a que la economía española crecerá entre un 3,4% y un 3,5% en el segundo semestre del presente año, por lo que las previsiones siguen siendo de cerrar el actual ejercicio con un crecimiento entre el 3,7% y el 3,8%. La desaceleración se traduciría, pues, en una cifra cercana al medio punto. 'Hacer previsiones para el año que viene es difícil, aunque el escenario económico en España lo veo con una cierta tranquilidad, entre otras razones porque nuestro sistema hipotecario no tiene nada que ver con el americano y nuestros bancos son solventes', señaló el vicepresidente.

La gran duda de Solbes es, pues, si la crisis se resolverá o no de forma rápida. 'No hay crisis de liquidez en el sentido clásico, por una parte hay dinero y por otra demanda de dinero. Algunos países como Estados Unidos creen que la solución es una bajada de los tipos de interés mientras que en Europa se ha renunciado a esta política para prestar mayor atención a la inflación. El impacto de la crisis dependerá de si se alarga en el tiempo', insistió.

La inflación no es algo que preocupe en exceso a Solbes. Aunque admitió que hay 'tensiones latentes' derivadas del aumento del precio del petróleo, un 33% si se compara con el del año pasado, y del encarecimiento de algunas materias primas, subrayó que su 'impacto se está absorbiendo de manera satisfactoria'. España, añadió, suscita una cierta envidia en los foros internacionales por el rigor de su política económica y presupuestaria, pues es vista 'como un país serio'.

El vicepresidente también matizó su contrariedad con algunas de las medidas sociales anunciadas por el Gobierno en las últimas semanas. 'Estoy de acuerdo con todo lo que hemos hecho. Este es un Gobierno de coalición entre el ministro de Hacienda y el resto de los ministros', ironizó. 'Las medidas se toman de forma colegiada y nadie gana los partidos por goleada, hay que negociar', abundó.

Fondo de la Seguridad Social

El vicepresidente fue preguntado por los senadores sobre la previsión del Gobierno de invertir hasta el 10% del Fondo de la Seguridad Social en renta variable y los riesgos que esta iniciativa puede acarrear teniendo en cuenta la volatilidad de los mercados.

Solbes argumentó que no está obsesionado por sacar parte de este Fondo a Bolsa en la actual legislatura, aunque preferiría que este paso se diera cuanto antes. 'Me es indiferente que sea en esta legislatura o en la próxima. Lo importante es que se gestiona de forma profesionalizada', respondió.

Ordóñez no prevé una caída brusca del consumo

El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, consideró ayer que no es 'probable' que el consumo privado y la inversión en vivienda sufran 'bruscas desviaciones de su senda gradual de desaceleración', especialmente, a la luz del 'robusto ritmo de creación de empleo y de aumento de la población'.Ordóñez insistió también en la importancia de preservar un superávit holgado de las cuentas públicas sin incurrir en desviaciones de gasto, informa Servimedia.Este es el segundo aviso en dos semanas que el gobernador lanza sobre las ligerezas en que puede incurrir el Ejecutivo con su política social. En opinión del gobernador, 'un buen manejo de la política económica es crucial y debe orientarse a proporcionar confianza a los agentes, preservando un margen suficiente de actuación frente a posibles sucesos futuros'.'En el ámbito de la política presupuestaria', precisó, 'esto se traduce en la necesidad de mantener su orientación actual, que está siendo beneficiosa para la estabilidad de la economía, alcanzando un saldo en superávit suficientemente holgado'.

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