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Hipotecas

Las familias prefieren los tipos variables pese al alza del euribor

La nueva estadística de hipotecas que elabora el INE estima que, de los 19.644 préstamos que registraron cambios en sus condiciones en enero, el 51,7% (10.149) correspondió a modificaciones en los tipos de interés. Pese a las últimas subidas del BCE, las familias apuestan por tasas variables en lugar de fijas y mayoritariamente por referenciarlas al euribor.

Estadística presentó ayer datos adicionales de la actividad hipotecaria, que aportan información sobre el número de cancelaciones y los cambios en las condiciones de los préstamos que se producen mes a mes. Las cifras de enero revelan que registraron cambios en las condiciones un total de 19.644 hipotecas, lo que supone un aumento del 40,6% anual.

El estudio sostiene que la mayoría de las modificaciones se produce dentro de la misma entidad financiera (novaciones), con 14.662 operaciones. 3.707 optan por cambiar de entidad (las subrogaciones al acreedor), y un número ya más pequeño, 1.275, cambian de titular del bien hipotecado (subrogaciones al deudor), muy comunes cuando se adquiere una casa sobre la que pesan pagos hipotecarios y se procede sólo a realizar un cambio de titular del préstamo.

Otra de las novedades, quizás la más notable, que incluye este estudio es la información sobre la migración de unas condiciones financieras a otras. Prácticamente una de cada dos hipotecas que cambian lo hacen para modificar el tipo de interés al que están contratadas (10.149 de 19.644), y o bien mejoran el índice variable utilizado, o migran de tipo fijo a variable.

El Gobierno ultima una nueva normativa para facilitar el cambio a tipos fijos

Este movimiento recogido por Estadística dista mucho del comportamiento esperado en un escenario de subidas de tipos de interés, que más bien aconsejarían contratar tasas fijas. De hecho, ante la dificultad hipotética que pueda generar la subida de tipos en las finanzas de los hogares, el Gobierno prepara una normativa para facilitar precisamente la migración de tasas variables (por tanto, inestables y encarecedoras) a tasas fijas.

En enero se mudaron 1.011 hipotecas que tenían tipos fijos, y adoptaron el crédito a coste variable de forma mayoritaria, y lo hicieron también de forma casi unánime tomando como referencia el euribor, el más asequible de todos, con un coste del 3,35%.

Las hipotecas que ya contaban con referencia variable, cambiaron mayoritariamente a variable, buscando indicadores más baratos, generalmente el euribor, huyendo de las referencias impuestas por bancos y cajas, que se mueven casi dos puntos por encima del euribor.

Pero tras las modificaciones, una pequeña parte de estas hipotecas (202 de 10.149) conservaron el tipo fijo, con una tasa media del 3,56%, mientras que el tipo medio fijo al que tenían previamente contratada la hipoteca era del 4,89%.

Tras la modificación de condiciones el interés medio de los préstamos se reduce 1,3 puntos en los créditos a tipo fijo y 0,8 puntos en las hipotecas a tipo variable.

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