Barcelona estrena puerto deportivo en la zona Fórum
El área donde se celebró el año pasado el Fórum de Barcelona va incorporándose poco a poco a la vida de la ciudad. El pasado mes de noviembre empezó a funcionar el Centro de Convenciones Internacional y ahora es el turno del nuevo puerto deportivo, conocido como Port Fórum. Aunque no está ubicado dentro del término municipal de Barcelona, sino en la población vecina de Sant Adrià del Besos, su situación al final de la avenida Diagonal hace que en la práctica pueda considerarse el tercer puerto deportivo de la capital catalana.
El puerto ya ha recibido las primeras embarcaciones. Por ahora están vendidos el 73% de los 201 amarres con que cuentan las dos dársenas. El amarre interior acoge a barcos entre 10 y 25 metros de eslora y el exterior, a naves de hasta 80 metros.
Luis Miguel Jarrillo, director general de Port Fórum Sant Adrià, la empresa concesionaria de la gestión por un periodo de 26 años, asegura que se trata de una instalación diferente, principalmente por el servicio de almacenaje para barcos, conocido como marina seca. 'Es una gran nave en la que se guardan barcos de hasta nueve metros de eslora, los propietarios llaman por teléfono cuando quieren utilizarlos y en un cuarto de hora lo tienen en el agua listo para navegar', explica. La marina seca tiene capacidad para 250 embarcaciones y el alquiler anual oscila entre los 1.500 euros para un barco de menos de seis metros de eslora y los 1.925 para uno de nueve. Los precios de almacenaje son 500 euros más baratos que los amarres tradicionales en el agua.
A parte de la dársenas y la marina seca, el complejo contará también con una zona comercial, de 20.000 metros cuadrados, que albergará tiendas, bares y restaurantes. Jarrillo insiste en que su instalación no va a tener la misma oferta que otros centros comerciales, 'vamos a hacer algo diferente, en caso contrario no conseguiremos atraer a la gente'. También asegura que no será una oferta dirigida a la elite, 'tiene que ser compatible con gente que posee un yate de 80 metros y público de un poder adquisitivo normal'.
Con el fin de poder controlar el tipo de comercio que se instala, la empresa gestora no va a vender los locales, sino a alquilarlos. El 40% de la superficie total se destinará a restauración, bares y alguna discoteca, que estarán abiertos únicamente hasta las dos o tres de la madrugada, para evitar que se le identifique con una zona 'de copas'. La empresa gestora tiene prevista la inauguración oficial del complejo comercial para después de verano, cuando las primeras tiendas abran sus puertas.
Tanto el nuevo puerto deportivo como el futuro zoo marino, proyectado en un área contigua, han recibido las críticas de la organización ecologista Greenpeace, que considera que afectan a los bancos de pesca.