Iberdrola ha impugnado "por razones de forma" la Junta General de Accionistas de la petrolera portuguesa Galp celebrada el pasado 28 de noviembre, en la que se aprobó el traspaso de los activos gasistas a la eléctrica lusa EDP. El objetivo de esta iniciativa es, según fuentes de la compañía, "proteger los intereses" de la empresa, puesto que "no se respetaron determinados requisitos jurídicos y formales".
La impugnación, presentada ante el Tribunal de Comercio de Lisboa, es de carácter "técnico-jurídico" y se refiere a "cuestiones formales" como el modo en el que se convocó la Junta o cómo se aprobaron los acuerdos, según fuentes de la segunda eléctrica española. Así, aseguraron que la impugnación no está relacionada con los aspectos de fondo aprobados en la Junta, con los que Iberdrola está de acuerdo.
La Junta de Accionistas de Galp aprobó el pasado 28 de noviembre el traspaso de su negocio gasista a EDP, medida que se inscribe en la reorganización del sector energético público diseñada por el Gobierno portugués. La propuesta contó con la oposición de la petrolera italiana ENI, que tiene una participación del 33,34% en Galp, y de Iberdrola, aunque la eléctrica española matizó que estaba de acuerdo en líneas generales con la reestructuración.
Iberdrola, que controla un 4% de Galp y un 5% de EDP, aspira a canjear estas participaciones por activos gasistas y eléctricos en Portugal.