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Manifestación

Protesta multitudinaria en Madrid contra la catástrofe del 'Prestige'

Al grito de '¡nunca más!', cientos de miles de ciudadanos enfilaron hacia la plaza de Cibeles, desde Atocha sobre las 12 y cuarto del mediodía, para 'exigir' responsabilidades por la catástrofe que han ocasionado los vertidos de fuel pesado del petrolero Prestige.

El acento gallego parecía predominar en la manifestación, porque los convocantes, la plataforma cívica Nunca Máis, habían organizado el viaje de 50.000 gallegos a la capital en 600 autobuses. La Delegación del Gobierno en Madrid indicó, sin embargo, que han contado hasta 450 autocares con viajeros procedentes de toda España para participar en este acto. A él se sumaron organizaciones ecologistas, numerosos artistas e intelectuales, sindicatos y partidos políticos en la oposición, entre ellos socialistas, nacionalistas gallegos (BNG), catalanes (Iniciativa per Catalunya) y vascos (PNV), Izquierda Unida y Los Verdes.

Entre todos, el portavoz de Nunca Máis, Bieito Lobeira, calcula que se sumaron a sus reivindicaciones 'los mismos que en la manifestación contra la guerra de una hace una semana, es decir, más de un millón'. La Delegación del Gobierno estima que fueron sólo unos cien mil los ciudadanos que atestaron ayer la Puerta del Sol desde las dos de la tarde hasta que, pasadas las tres, el escritor Manuel Rivas leyó el manifiesto final, Da dignidade (De la dignidad), en el que se pidió 'un verdadero Plan Galicia con plazos determinados y asignación de recursos' para la recuperación económica y social de la región, calificó de 'penosa' la gestión de la crisis del Gobierno y, por ello, reclamó las dimisiones del presidente de la Xunta, Manuel Fraga, y del titular de Fomento, Fancisco Álvarez- Cascos.

A la petición estas dimisiones, los actores Juan Diego Botto y Luis Tosar, añadieron en su propio manifiesto las del vicepresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, del ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, y de la vicepresidenta de la Comisión Europea, Loyola de Palacio.

El comisionado del Gobierno para la crisis del Prestige, Rodolfo Martín Villa, expresó su sorpresa por la petición de estas dimisiones, pues, en su opinión, la trayectoria de Fraga es 'proverbial'. Afirmó que éste, junto con Rajoy y Cascos, 'han sido los más ejemplares en su actuación'.

La presencia destacada del secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, junto con otros dirigentes socialistas en la manifestación fue blanco de las críticas del presidente del Gobierno. José María Aznar afirmó en una entrevista a Efe: 'Creo que a un dirigente político le es exigible no tanto andar de manifestación de manifestación y de pancarta en pancarta como tener criterio'. Aznar, que aseguró que 'todos somos partidarios de la paz' y de 'que nunca más se vuelva a romper un petrolero en las costas españolas', afirmó: 'En la oposición, parece que tienen más querencia por la pancarta que por la responsabilidad'.

El secretario general de los populares, Javier Arenas, afirmó por su parte que Zapatero se había convertido 'en un hombre pancarta'.

Las protestas para reclamar el castigo a los responsables de la catástrofe se hicieron escuchar también ayer en Bruselas, donde medio millón de manifestantes, la mayoría españoles, marcharon bajo el lema 'Mareas negras: nuca más'.

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