Recetas políticas similares para atraer a las multinacionales
La dieta estricta a la que se ha sometido la economía española parece que ha surtido su efecto, al menos, para las empresas extranjeras. La desconfianza y la salida de capital del extranjero tuvo su cénit en 2012, en el que la prima de riesgo alcanzó máximos históricos y las desinversiones se elevaron a 22.000 millones de euros. A partir de esa fecha se han aplicado tres reformas (consolidación fiscal, laboral y financiera) que han generado un marco fiable para las multinacionales, aunque con matices. “Las empresas lo que reclamamos es seguridad jurídica, seguridad regulatoria y seguridad fiscal”, apuntó Juan Arrizabalaga, presidente de Altadis-Imperial Tobacco, durante su intervención en la jornada La Contribución de las Multinacionales Extranjeras a España.
Organizada por la organización Multinacionales por Marca España, compuesta por 32 grandes compañías extranjeras, la jornada sirvió para que tres responsables políticos presentaran las propuestas con las que concurrirán a las elecciones y tratarán de cautivar a las multinacionales. Estas, según los datos de la organización, ocupan a 1,3 millones de personas en España y generan una cifra de negocio superior a las 434.000 millones de euros.
Unas cifras nada despreciables que obligaron a los tres responsables políticos a emplearse a fondo para defender sus argumentos. Y el más vehemente fue Miguel Ángel Gutiérrez, delegado territorial de Ciudadanos por Madrid y número cuatro de la lista electoral por esta circunscripción, que evitó el discurso político. “Queremos bajar el impuesto de sociedades al 20%. Es una cifra que debe ilusionar a las multinacionales y debe servir para crear un ecosistema económico estable”, señaló en clara alusión a los tres cambios normativos “por real decreto” que ha aplicado el Ejecutivo en el impuesto de sociedades.
Un golpe en la línea de flotación del Ejecutivo, que fue rápidamente respondido por el vicesecretario general de Comunicación del PP, Pablo Casado. “No pretendemos recuperar el impuesto de Patrimonio y tampoco hemos bloqueado en Andalucía una supresión del impuesto de Sucesiones y Donaciones”, dijo en alusión al pacto de Gobierno entre PSOE y Ciudadanos en Andalucía. Casado sintetizó las bases económicas del programa con el que concurrirán los populares. “Nuestra idea es no molestar, lo que significa bajar impuestos siempre que se pueda, y eliminar trabas burocráticas a las empresas”, apuntó. Esas dos ideas se plasmarán en una segunda ronda de la ley de unidad de mercado, “con el fin de racionalizar el gasto y armonizar las legislaciones”.
Más incentivos a empresas y a I+D
El último en intervenir fue Juan Moscoso, portavoz de Economía en el Congreso, que sustituyó a última hora a Manuel de la Rocha, secretario de Economía de la Comisión Ejecutiva del PSOE. Moscoso señaló que el inicio del nuevo ciclo económico debe servir para poner las bases con las que evitar los errores del pasado. “El futuro dependerá de los incentivos que se otorguen a los sectores que tiren del crecimiento y del empleo, sobre todo las de base tecnológica y las que hacen I+D”, señaló. Moscoso quiso dejar claro que esos incentivos se plantearán de acuerdo con el marco comunitario para que no haya competencia entre países. “Las multinacionales tienen que competir entre sí, pero los Estados no deben intervenir”, precisó.
El borrador del programa del PSOE, que se presenta oficialmente el jueves, establece, por ejemplo, “extender los incentivos fiscales en I+D a inversores privados, ya sean personas físicas o empresas, que inviertan en empresas innovadoras”. En relación a la unidad de mercado también establece la necesidad de “promover un diálogo con todas las administraciones para reducir las diferencias fiscales entre autonomías (imposición, tasas, subvenciones)”.