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Las entidades prefieren que la recapitalización se haga con 'cocos'

Bruselas pretende inyectar capital a BMN, Caja3 y Ceiss

Las cajas que necesitan ayudas no ganan para sustos. Al drástico recorte que ha exigido Bruselas a las cajas nacionalizadas, a las que les pide una reducción de su tamaño cercano al 60%, ahora les ha tocado el turno a las tres entidades de ahorro que necesitan ayudas públicas para sobrevivir un tiempo para poco a poco ir devolviendo estos fondos. Son el caso de BMN. Caja3 y Caja España-Duero (más conocida ahora bajo la marca de su banco, Ceiss). Bruselas anunciará la aprobación o no de sus planes de recapitalización el próximo 20 de diciembre.

Tras ello, la idea era que estas entidades recibieran bonos convertibles contingentes (cocos) para cubrir sus deficiencias de capital, por los que pagarían un interés del 8%. Bruselas pretende ahora que esta inyección de capital sea directa. Fuentes de BMN aseguran que ello no alteraría la composición de la cúpula.

En Caja3 o Ceiss esta pretensión si podría resultar significativa para sus planes. Ambas entidades se encuentran en sendos procesos de absorción.

Ibercaja ha acordado la compra de Caja3 bajo el condicionante de que esté completamente saneada y realizado su ajuste de plantilla. Unicaja hará lo mismo con Ceiss, con lo que la inyección de capital podría influir en la operación, aseguran varias fuentes conocedoras de estos procesos.

Fuentes sindicales aseguran que en las últimas reuniones mantenidas con los responsables de Caja3 éstos han argumentado que deben realizar un drástico ajuste de plantilla antes del 17 de diciembre sino quieren llegar a su intervención. Las mismas fuentes afirman que esta es una condición impuesta por Ibercaja, única tabla ahora salvavidas de Caja3.

Pese a todo, el plan de reestructuración de este grupo integrado por Caja Badajoz, CAI y Círculo de Burgos, no incluía ni una fusión ni ningún recorte de plantilla, y con el que pretendía reducir su factura de ayudas públicas de 779 millones de euros a 255 millones.

En la reunión mantenida ayer entre los representantes de los trabajadores de Caja3 con la entidad les han sido informado de que el grupo ya ha abierto el periodo de consultas para el procedimiento de despido colectivo. La firma pretende despedir a 592 empleados, casi la cuarta parte de la plantilla, y cerrar 187 oficinas. Los sindicalistas tienen previsto hoy no asistir a la reunión con la entidad y mantendrán un encuentro con la presidenta del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi en Zaragoza.

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