Una Cataluña independiente sería un "Estado fallido" para el IEE
La cuestión catalana, un trabajo elaborado por el IEE dibuja un escenario entre "catastrófico" y "apocalíptico" para el futuro económico de una Cataluña independiente.
Decía Josep Pla que una de las cosas más difíciles en esta vida es encontrar el adjetivo exacto. "Catastrófico", "apocalíptico" o "inviable" son algunos de los calificativos que los economistas que hoy han presentado el informe del IEE han hallado para ilustrar el día después de una hipotética Cataluña independiente. Clemente Polo, catedrático de Fundamentos del Análisis Económico de la Universidad Autónomas de Barcelona, auguró que, en el caso de que Cataluña se independizara, sus exportaciones a España caerían un 50%, lo que generaría el cierre de empresas y un paro galopante. Polo recordó que el mercado español es el destino mayoritario de las exportaciones catalanas y, en caso de perderlo, Europa no cubriría ese agujero.
El presidente del IEE, José Luis Feito, apuntó que, "sin ninguna duda", Cataluña quedaría fuera de la UE si se separase de España. Y si bien sería posible mantener el euro como moneda, las entidades financieras quedarían fuera del Eurosistema, lo que, en opinión de Donato Fernández, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Madrid, convertiría a Cataluña en un "Estado fallido". Ni la Administración ni las empresas tendrían acceso al crédito que necesitarían. "Una separación de Cataluña del resto de España implicaría una disminución de su PIB en 42.266 millones de euros por la disminución del saldo comercial, la deslocalización de empresas y la contracción de la demanda interna", señaló Fernández, que recopiló esos datos de un trabajo publicado por Convivencia Cívica Catalana.
Junto a estos problemas, los expertos apuntaron que el día después de una hipotética Cataluña independiente, se produciría una salida masiva de capitales y las entidades financieras deberían trasladar su sede a España para continuar dentro del Eurosistema. Clemente Polo, por su parte, argumentó que el apoyo de muchos catalanes a la independencia sólo puede explicarse por el hecho de que "el pueblo no entiende lo que está pasando."
Reproche a los economistas catalanes
El presidente del IEE, José Luis Feito y el director del IEE, Joaquín Trigo, denunciaron el "silencio" de los economistas catalanes ante el proyecto soberanista del presidente de la Generalitat Artur Mas. La visión del IEE contrasta con la opinión de economistas como Xavier Sala-i-Martín, promotor del llamado Colectivo Wilson, que defiende los beneficios de la independencia. Forman parte de este grupo otros economistas catalanes como Jordi Galí, Pol Antràs o Carles Boix, académicos que, como Sala-i-Martín, han desarrollado su vida profesional en prestigiosas universidades extranjeras.